Ni la reforma laboral, ni las liberalizaciones ni el saneamiento de cuentas han servido para mitigar el principal problema de la economía española -el desempleo- sino al contrario están permitiendo o favoreciendo que siga creciendo a cotas inimaginables.

Según un informe de Afi-ASEMPLEO,  la EPA del primer trimestre del año (que se publicará el 25 de abril) es previsible que se salde con una caída de la ocupación de 340.000 personas y el número de parados se incrementará en torno a 185.000 personas, elevando la tasa de desempleo hasta el 27,01%.

El informe de Afi-ASEMPLEO recuerda que este año ha comenzado con una nueva e importante caída de la afiliación, superior a 250.000 personas, y un incremento del paro registrado próximo a 186.000 personas. «En ambos casos, -afirma- el deterioro es inferior al del mismo período de 2012 pero todavía relevante dado el momento del ciclo en el que se encuentra la economía española».

La coincidencia de la Semana Santa en el mes de marzo contribuye, añade,a suavizar el deterioro del mercado laboral en el primer trimestre del año (30.528 afiliados más y 5.000 parados menos).

Los registros mejoran de forma sustancial los observados en el mismo período de 2012, con el matiz de que fue en los primeros meses del año pasado cuando se inició la segunda fase de recesión económica y laboral.

Así, «la corrección de los datos de estacionalidad permite contextualizar mejor la recuperación de marzo. La caída de la afiliación en 27.000 efectivos es la mitad de la producida en marzo de 2012 pero continúa siendo superior a las de 2010 y 2011″.

Para los redactores del informe, la clave reside en que todavía no se aprecia una estabilización del empleo en la industria y la construcción y que el soporte de la hostelería y actividades relacionadas no logra compensar las cesiones de la afiliación en actividades profesionales, servicios sociales o administración pública.

No hay modelo económico para crecer

Por primera vez desde mediados de 2011, la caída trimestral de la afiliación sin estacionalidad es menor a la del trimestre precedente, pero aún elevada para hablar de estabilización del empleo, asegura Afi-ASEMPLEO.

El informe pone de relieve también que la contención en la caída de la afiliación en el  primer trimestre del año sugiere un mejor comportamiento relativo de la actividad respecto al cierre de 2012 y que la productividad laboral se incrementa por la destrucción de empleo y no por una mayor eficiencia económica.

En definitiva, dice Afi-ASEMPLEO «del análisis de la evolución del PIB y del empleo se extrae la conclusión de que la productividad aparente del trabajo en España viene determinada por la destrucción de empleo y no por un modelo económico capaz de crecer».