Los despojos del ‘ladrillo’ han terminado por reanimar la inversión extranjera. En 2013, la cifra global de inversión bruta procedente del exterior sumó 15.810 millones, un 8,8% más. Entre los grandes sectores, la actividad inmobiliaria protagonizó la mayor subida, un 66%. Le sigue la banca, que se ha visto también obligada a soltar lastre por su exposición al sector inmobiliario, y que captó un 42% más de inversión. Los inversores, en cambio, en su mayoría europeos, aunque gana peso América Latina, huyen de otros sectores, como la industria. En general, su vuelta a España se debe a que los inversores ven ahora más despejado el camino del euro.

El ministerio de Economía presentó hoy jueves por primera vez los datos de su Registro de Inversiones Exteriores. Según esta fuente, la inversión bruta creció en España en 2013 un 8,8%. Descontadas las desinversiones, la inversión neta ascendió a casi 15.400 millones, lo cual contrasta con la caída de 3.100 millones anotada el año anterior.

El registro de Economía recoge las compras de acciones de empresas españolas por parte de inversores extranjeros que sobrepasen un 10% del capital. Así, por ejemplo, no incluye la reciente compra por Bill Gates de un 6% de FCC, según aclaró el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz.

España es el segundo país del mundo en crecimiento de inversión extranjera, afirmó Legaz. Sin embargo, en términos generales, la inversión continúa desplazándose hacia los países emergentes. El flujo inversor aumenta también en los países desarrollados, pero estos pierden cuota en favor de los emergentes. En cifras, las economías en desarrollo captaron el 52% del total de inversión extranjera en 2013, frente al 29% en 2007. Mientras, en el mismo período, los países desarrollados captaron un 39% en 2013, frente al 65%, en 2007.

A pesar del desplazamiento hacia los emergentes, España se comportó mucho mejor que la media de los países desarrollados. Con datos de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, en sus siglas en inglés), la inversión en España creció un 33% en 2013, frente a un aumento medio del 2,7% de los países desarrollados, apuntó Legaz.

Legaz: “Los inversores anticipan la recuperación”

A pesar de la recesión, el año pasado fue el cuarto mejor año en los últimos trece en cuanto a inversión extranjera neta, apuntó García-Legaz. “Los inversores siempre anticipan la recuperación económica”, sentenció. También desde 2000, fue el quinto mejor año en inversión bruta; y el tercero mejor en desinversión.

El incremento de la inversión extranjera en 2013 en España se debió a que ese año se disipó cualquier duda en torno a la Unión Monetaria y el futuro del Euro, y a la recuperación de la competitividad de la economía española, señaló el responsable del ministerio de Economía.

Los países de la OCDE continúan liderando el ránking de inversión recibida, con un 90% del total, es decir, 14.302 millones de euros. La mayor parte de la inversión procede de la UE-27, un 73,6% del total; y, más en concreto, de la zona Euro (UE-15), con un 72,8%, es decir, 11.516 millones (un 16,5% más que el año anterior).

En cuanto a la procedencia, los Países Bajos -donde radican muchas multinacionales y entidades de inversión- lideran la lista de países inversores en España, con 2.239 millones de euros, un 14,2% del total; seguidos de Reino Unido, un 11,8%; Francia, un 11,2%; Alemania (8,6%); Estados Unidos (8,2%).

La inversión procedente de América Latina creció un 48% por ciento en el último año, y pasó a representar un 7,1% del total frente al 5,2% del año anterior; con México como gran protagonista, con un incremento de la inversión del 273%, hasta alcanzar los 559 millones.

En cuanto a los paraísos fiscales, la inversión procedente de estos territorios creció hasta 366 millones de euros, un 2,3% del total.

Madrid pierde un 7% de inversiones

En cuanto al destino de esas inversiones, Madrid continuó liderando la lista de comunidades autónomas bañadas por la inversión extranjera, con un 54% del total; si bien la región perdió un 7,1% de la inversión recibida un año atrás hasta 8.635 millones. Cataluña fue la segunda región en cuanto a la inversión recibida, con un 22% del total, tras ganar un 31,5% en el último año, hasta 3.511 millones de euros; seguida de País Vasco, con 984 millones, un 6,2% del global.

Sin embargo, el registro no proporciona datos sobre el destino final de la inversión. Es decir, el flujo se anota en Madrid, donde se ubican muchas de las sedes de importantes empresas, pero el dinero puede terminar viajando a cualquier otra provincia de destino.

Interés por la banca, inmobiliario y construcción

Por sectores, la banca y los seguros acaparan casi un 20% de la inversión bruta registrada en España, con 3.140 millones de euros, un 42% más. De los grandes sectores destaca el crecimiento de inmobiliario (1.787 millones) y construcción (1.437 millones), un 66% y un 21% más.

Según el ministerio de Economía, el fuerte aumento de la inversión extranjera en el sector inmobiliario y de la construcción se debe a que los inversores tienen la “sensación” de que el ciclo de caídas en los precios “está llegando a su fin”, afirmó García-Legaz.

Por otra parte destaca la caída de inversión que sufrió la industria manufacturera, que captó 2.641 millones, un 38% menos que un año atrás.

Respecto al futuro, García-Legaz pronosticó un buen año, que ha empezado con la compra por parte de Vodafone de Ono en un sector de alto valor añadido”, afirmó el responsable de Economía, que condicionó el crecimiento de la inversión a que continúe mejorando la marcha de la económica y se reduzca el desempleo.

Datos micro, frente a flujos financieros

Los datos presentan diferencias respecto a otras fuentes estadísticas. El Banco de España, por ejemplo, mide los flujos financieros, especialmente la compra de deuda pública por inversores extranjeros o los préstamos a empresas españolas. En cambio el Registro de Inversiones Exteriores del ministerio de Economía ofrece “información micro”, permite conocer con más detalle en qué sectores invierten los extranjeros, en qué comunidades autónomas, cuánto invierten y también cuánto desinvierten. Con una limitación. Los inversores solo están obligados a comunicar sus compras cuando estas superan el 10% del capital de una empresa. Así, por ejemplo, la compra por Bill Gates de un 6% de FCC no ha dejado huella en este registro, indicó García-Legaz.