La inmobiliaria Renta Corporación, que sigue suspendida de cotización, ha reiterado ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su deseo de volver al mercado bursátil, después de que la juez levantase el concurso de acreedores en julio de este año. La compañía, que presentó concurso voluntario el pasado año, ha admitido en un informe de 75 páginas al organismo regulador de los mercados bursátiles los riesgos a los que se enfrenta aún la empresa en un entorno que ha estado marcado por la crisis financiera e inmobiliaria.

Si bien los datos de los nueve primeros meses del año presentan todavía el efecto del debacle anterior. Renta Corporación ha presentado unos beneficios de 28,9 millones de euros en los nueves primeros meses del año, de los que 1,6 millones corresponden a las actividades ordianrias y 28 millones al impacto del acuerdo de la dación en pago de deuda, garantías y quitas acordadas con los acreedores.

Las ventas ordinarias se han reducido un 56% respecto al año anterior, con un Ebitda (resultado bruto de explotación) negativo de 26,4 millones, por el efecto de las ventas a las entidades financieras. El grupo logró un margen en las ventas, también negativo, de 27,8 millones de euros, aunque descontando los efectos del concurso de acreedores sería positivo en 0,5 millones de euros. Los datos son más positivos en lo que se refiere a la deuda, que se sitúa en 55 millones, con una reducción de 105 millones en relación a diciembre de 2014, debido, en parte, a las quitas acordadas.