Desarrollado sobre el último Mercedes-Benz Clase S, con el que guarda una estrechísima similitud estética, el nuevo Mercedes-Maybach Clase S mide 5,45 metros longitud, 20 cm más que el Clase S de batalla y largura extendidas (exhibe 3,37 metros entre ejes, es decir, 20 cm más). De hecho, será el nuevo tope de gama de la Clase S, y no una marca independinte como sucedió dentro del consorcio germano entre 2003 y 2012, cuando contó con un vehículo de dos longitudes e impronta exclusiva.

Como cabe apreciar, sus plazas traseras son tan protagonistas como suntuosas. No obstante, se trata de un vehículo que, sobre todo, conducirán chóferes. Precisamente, ese entorno gana en anchura y altura (en parte por la diferente curvatura del techo y la silueta casi rectangular de la puerta), pero sobre todo suma centímetros en longitud.

En consecuencia, la atención que procura a sus ocupantes es fastuosa: techo panorámico practicable, bucatas individuales con regulación eléctrica, climatización y función masaje, «paquete chófer» para adelantar la butaca del copiloto y ganar sitio para las piernas, extensiones para las piernas como en la clase Business de una gran aerolínea, otro tanto con mesitas plegables y las luces individualizadas, alumbrado ambiental indirecto…

Daimler ha previsto para su nuevo Mercedes-Maybach Clase S, un modelo sobre todo ideado para los mercados chino, ruso y estadounidense, propulsores de gasolina sobrealimentados V12 de 530 CV (versión S 600) y V8 de 455 CV (S 500). La tracción será inicialmente trasera, pero el próximo verano se añadirá una alternativa integral S 500 4Matic.