Extremadura es una de las regiones españolas que nos ofrece una extraordinaria selección de productos gastronómicos de calidad. Aunque posiblemente sus vinos sean uno de los productos más desconocidos. Bendita Extremadura, junto a varios expertos enólogos y reconocidos sumilleres de la tierra, nos desvela buenos blancos, tintos o cavas y sin que sufra nuestro bolsillo, ya que ninguna de sus propuestas tiene un precio superior a 20 euros. Algo que se agradece tras los excesos navideños.

Cada vez son más los que desde los aperitivos al postre prefieren acompañar la velada con cava. Para ellos, el exclusivo cava de las Bodegas Vía de la Plata Chardonnay Brut Nature Edición Especial (14,16€) -con una producción limitada de 3.000 botellas al año- puede convertirse en una opción redonda. Con una nariz donde se conjugan aromas de crianza con una potente fruta de piña y algunas notas cítricas, nos encontramos ante un cava que sorprenderá a los más exigentes.

Es recomendable acompañar aperitivos, mariscos y pescados con un buen vino blanco. Entre los blancos de tierras extremeñas encontramos el refrescante Dulce Eva (4,50€), que como su nombre indica, está elaborado con uva de la variedad Eva, con aromas tendentes a frutas tropicales como el plátano.

Los vinos tintos con cuerpo y estructura son excepcionales para acompañar las carnes y los platos más fuertes. Entre los de Denominación de Origen Ribera del Guadiana destacan Carabal Cávea de Viñedos y Bodegas Carabal (12,61€), galardonado con el Premio Espiga al mejor tinto crianza. En boca entra discreto, pero se hace grande en el paso, destacando su complejidad y matices. Otro de los recomendados de la denominación extremeña es el Viña Puebla Madre del Agua (19,90€), un crianza de Bodegas Toribio premiado con el Arabel de Oro. Se trata de un vino muy potente y sabroso en el que predominan los toques golosos combinados con las frutas negras que al final se van haciendo licorosas y muy agradables. Tiene gran amplitud y un gusto final redondo.

En Tierra de Barros también existen vinos de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana. Allí nace Palacio Quemado Los Acilates 2010 Crianza (14,52€). Pertenece a la gama clásica por excelencia de los caldos de Bodegas Alvear y está elaborado con 100% tempranillo.

Por menos de 10€ encontramos un tinto crianza sabroso intenso y elegante denominado Chacona Oro. Bodegas La Pelina, ubicadas en Badajoz, elabora desde hace más de cien años sus caldos.

Y para confirmar que se puede beber bien sin gastar mucho, los expertos enólogos extremeños nos recomiendan un tinto joven de estilo fresco y cercano electo con el nombre de sus bodegas: Carlos Plaza (6€). Otro económico es Bureo Selección (8,45€), considerado uno de los vinos estrella de la Bodega Otero Vaquera; en su color perduran los tonos violáceos, lo que nos indica una larga vida, intensidad aromática alta con notas de torrefacto, vainilla y chocolate.

Extremadura también elabora vinos ecológicos. Uno de los tintos más prestigiosos en los últimos años es Habla del Silencio (11,50€). Según afirman desde su bodega “es un vino de etiqueta a precio de diario”. La aventura empresarial de Bodegas Habla comenzó hace 13 años mapa en mano en busca del terreno perfecto para la plantación de las cepas, que se encontró en Trujillo, y así han conseguido una gama de vinos única.

Y como cierre de esta selección excepcional  de vinos extremeños, desde Bendita Extremadura nos presentan un vino adecuado para maridar con los postres. De nuevo Viña Santa Marina se desmarca con un blanco, y por ser de vendimia tardía, con un sabor  dulce: Viognier Vendimia Tardía (9,32€).