La reactivación económica y la creación de empleo son una prioridad para la ciudad, que está en “una constante trasformación”, según el alcalde. En orden de importancia le sigue la atención a las personas más vulnerables, y también “se ampliaran los servicios de Barcelona Activa aprovechando las nuevas tecnologías” y así ofrecer formación y captar talentos gracias a Internet.

El turismo “es lo que genera más ocupación” y es que el 12% del PIB. En esa línea, Trias ha insistido ante el empresariado catalán en su reivindicación de pedir al Gobierno el IVA que recauda Barcelona por el turismo, con el fin de destinar ese dinero a nuevas medidas para reforzar los servicios de limpieza y seguridad de la ciudad.

La revolución de la tecnología del XXI ha llevado a Barcelona a ser la Capital Mundial del Móvil y con ello ser una Smart City de referencia que ha creado más de 1.000 empleos. El alcalde se ha comprometido a “impulsar una línea de ayudas a los emprendedores y a la innovación industrial”, con 10.000 euros a fondo perdido y un aval de hasta 100.000 euros para facilitar el acceso al crédito.

Con más de 96 empresas TIC instaladas desde el 2011, Barcelona ha creado 20.000 puestos de trabajo a través de la inversión extranjera. En este punto, el Barcelona Growth Center al 22@ y la Oficina de Atención a la Empresa han jugado un papel importante en el crecimiento económico.

Como ciudad socialmente innovadora, Trias ha hecho hincapié en el incremento de un 43% del presupuesto en la ampliación de oferta de servicios y políticas sociales, fortaleciendo la teleassistencia, ayudas alimentarias y la pobreza energética. Otra apuesta es la de mejorar los mercados municipales de Barcelona, aspecto en el que se invertirán 130 millones.