Nos encontramos ante un restaurante de lujo en el epicentro de un ambiente castizo y señorial con tres ambientes distintos para disfrutar de la buena gastronomía.

La Lonja. Podrás ver su cocina con la parrilla de carbón de encina que acoge pescados, mariscos, carnes gallegas y verduras orgánicas seleccionados diariamente. La carta es una oda a los frutos del mar frescos y de calidad: lubina y rape al espeto, rodaballo salvaje, pulpo al romesco, salpicón, alcachofas con vieras, salmorejo de langostinos de Sanlúcar… El espacio es sencillamente espectacular. Se accede por una larga escalera que ya te va avisando de que lo que encontrarás arriba te seducirá. Decorado con un gusto exquisito algunas mesas son para llevártelas a casa. Cada detalle y cada rincón están cuidados con mucho mimo. Colores, ambientes, mobiliario, terciopelos, lámparas, vajilla… todo lo que está a la vista cautiva. Si a eso añadimos que las mesas cuentan con una separación más que adecuada para preservar la intimidad de los comensales y que algunas están ubicadas junto a ventanales con el Palacio Real iluminado asomándose tras el cristal, se disfruta de un entorno ideado para abandonarse al hedonismo. El servicio es atento en su justa medida y los precios están a la altura de tan regio ambiente…

La Mar. Todo establecimiento que se precie cuenta con una terraza que además está abierta los 365 días del año. Ofrece la misma carta que en el interior que se completa con la elaboración de buenos arroces y fideuas cocinados en el momento. También disponen de una selección de vinos por copas que acompañan a tapas ligeras, sanas, pinchos, ibéricos y algunos platos de cuchara. En la terraza destacan también las frituras de pescado: calamares, salmonetes, boquerones, cazón en adobo…

Raw Bar. Es la zona más informal de toda La Lonja del Mar. Un espacio ecléctico ubicado a pie de calle, el más cool y cosmopolita de los tres ambientes. La carta aquí está inspirada en el universo del crudo y el ahumado con la máxima frescura, finas texturas y sabores más auténticos: ostras, ceviche, carpaccios, sashimis, tataki… También se pueden pedir los mariscos del día al peso; entre los fijos, carabineros y gambas blancas de Huelva, alistados de Almería, langostinos y percebes. En el Raw Bar además puedes degustar una amplia variedad de cócteles o tomarte unas copas en sus mesas bajas.