Lo positivo de la jornada es que no ha caído de nuevo el mercado, lo negativo es que ha terminado más cerca de los mínimos que de los máximos, a pesar de que intentó recuperar algo del terreno perdido ayer:

No se puede decir que no se intentara. En este gráfico del S&P 500 en velas de cinco minutos puede verse claramente cómo lo intentó hasta dos veces y en las dos terminó fracasando.

¿En qué escenario nos va a tocar vivir en las próximas semanas? Pues además del eterno asunto griego y del nuevo asunto portorriqueño, el más puro análisis chartista dice que son posibles caídas abultadas sin perder el lateral en el que se desarrolla la actividad en  los últimos tiempos, pero que también es posible que estemos ya en niveles de rebote:

En el gráfico he marcado en trazo azul discontinuo las líneas de dos presuntos canales de medio plazo en los que la banda superior parece clara por los máximos y la inferior podría ofrecernos dos posibilidades. La más favorable fijaría el punto de rebote exactamente en estos niveles, con la confluencia añadida de otro canal de corto plazo. La más desfavorable llevaría al S&P 500 al entorno de los 2000 puntos, zona en la que se apoyaría en algún soporte relevante y comenzaría el camino ascendente.

Ya veremos por donde sale el sol… Al cierre, el Dow Jones avanzó un 0,13%, el S&P 500 un 0,27%, el Nasdaq 100 un 0,39%, el Nasdaq Composite un 0,51%, el Nyse Composite un 0,14% y el Russell 2000 un 0,58%.