Cuando se producen jornadas como la de ayer sólo pueden pasar dos cosas al día siguiente. La primera es que se produzca otro bajonazo de impresión y la otra es que el mercado trate de agarrarse a cualquier clavo ardiendo y se propicie un rebote, incluso con fuerza.

De hecho, subir más de un 2% sería consdierado una machada cualquier día, pero no hoy, por l mero hechod e que ayer se bajó más de un 4,5% y lo desandado hoy no sirve siquiera para recuperar lo perdido ayer. Cosas de la volatilidad. Cuando todo baja mucho, parece que una subida de un 2% es poca cosa, pero solo es así en función del gráfico que se elija.

Este gráfico intradiario da una idea del buen rango de la subida, pero deja claro que todo ha estado muy plano, en un lateral que deja ver claramente cómo los muy cortoplacistas han impuesto su ley, deshaciendo posiciones al llegar a la zona de máximos del día una y otra vez. Sólo al final parece que las cosas estaban más alcistas, pero no ha dado tiempo a más.

Este segundo gráfico intradiario del Ibex pone un poco más en su sitio todo lo ocurrido hoy. En él vemos dos días de operativa y deja claro que el nivel a superar ha sido respetado claramente, con la única incógnita de las velas del momento del cierre, que parecen habe superado esa zona.

¿A qué se debe que justo ahí parezca haber una reacción? Se ve bastante bien en este otro gráfico:

Como puede apreciarse, la jornada ha sido positiva para el petróleo, especialmente en el último tramo de la sesión europea, lo que ha apuntalado los cierres de los índices del Viejo Continente en la zona de máximos del día.

El problema es que todo lo que proviene del petróleo ha que cogerlo ahora mismo con pinzas. La causa de la subida de hoy es un rumor que asegura que ya hay acuerdo en la OPEP para reducir la producción. Veremos si pasa como con todos los anteriores y es desmentido categóricamente en pocas horas.

Otra circunstancia que ha venido bien hoy al mercado ha sido el anuncio de Deutsche Bank de que recomprará 4.800 millones de euros de deuda senior. Esto calma bastante la ansiedad respecto a la situación de la entidad, de la que se aseguraba hace bien poco que no podría afrontar los pagos previstos para este año, extremo desmentido tajantemente antes de ayer.

Total, que entre todos empujaron y por inercia se subió. El problema es que para mantener el tipo y seguir subiendo tiene que existir mucha más convicción que la demostrada hoy. El lateral deja demasiadas dudas y la reacción es más técnica que otra cosa mientras no nos demuestren lo contrario, así que mucho cuidado ahí fuera.

Y no querría olvidarme de un aspecto del Ibex que comienza a preocupar. Cuando baja, baja como el qu más, pero cuando todo sube, no sube como el que más. De hecho, sube como el que menos. Hoy solo ha subido menos la Bolsa portuguesa y hasta la Bolsa griega ha rebotado más y mejor. Para que luego nos vengan diciendo que la incertidumbre política no pasa factura.

Al cierre, el Dax avanzó un 2,45%, el Ibex un 2,25%, el CAC un 2,52%, el Eurostoxx un 2,83%, el Mib italiano un 4,70%, el PSI portugués un 1,66% y el GD de la Bolsa de Atenas un 3,04%.