Asempleo, patronal de las empresas de trabajo temporal (ETT), ha cifrado hoy en 7.000 o 8.000 millones de euros el coste inicial de implantar en España el llamado modelo austriaco. Este fondo de capitalización, donde los trabajadores acumularían el importe de la indemnización por despido con posibilidad de rescatarlo en caso de despido o de diferir su cobro hasta después de la jubilación, forma parte del pacto entre el Partido Popular y Ciudadanos. Y es materia de negociación entre el grupo popular y las demás fuerzas políticas con presencia en el Congreso.

Además, la patronal ha avanzado sus previsiones de empleo para 2016 y 2017. Asempleo considera que el presente año se cerrará con la creación de 560.000 empleos, mientras que el año próximo lo hará con 430.000 nuevos puestos de trabajo. De este modo, el período 2013-2017 se cerraría con 1,7 millones de empleos más.

Andreu Cruañas, presidente de Asempleo, ha abogado por financiar la llamada mochila austriaca con el dinero que se dedica anualmente a las bonificaciones a la contratación, junto a otras fuentes de ingresos como el gasto en prestaciones por desempleo que el Estado se ahorra debido a una “desgracia”, como es la caída de la cobertura de la protección social.

Sin embargo, las ETT desconfían de que el modelo austríaco pueda servir en el caso de los trabajadores temporales. Y piden en cualquier caso participar en la gestación del modelo comprometido por los ‘populares’ y la formación naranja.

Reforma de las políticas activas

Cruañas se ha mostrado más partidario de abordar una reforma a fondo de las políticas activas de empleo, que atienda especialmente a los parados de larga duración pero también al personal en activo. Esta reforma debe contar en su opinión con una perfil estadístico de los demandantes de empleo en España (algo que ya está haciendo Fedea, la fundación de economía aplicada); así como definir claramente la cartera de servicios que ofrecen los servicios públicos de empleo, dependiente del Estado central y de las comunidades autónomas.

Por último Cruañas ha defendido la necesidad de incrementar el personal que diseñe el itinerario personalizado a los parados comprometido por el Gobierno. En este sentido ha comparado las cifras de España, donde cada funcionario debe atender a 120 parados, con las de Alemania –60 parados– y Reino Unido –20 parados, en un modelo de cooperación pública-privada–.

Finalmente también es preciso poner en contacto la oferta y la demanda con un portal único que recoja la oferta de empleo de todas las comunidades autónomas, e incluso de los portales privados de empleo.

Afloja la creación de empleo

En cuanto a las previsiones de empleo, la entidad estima que 2016 se cerrará con 560.000 nuevos empleos, un 3,3% más; mientras que en 2017 el incremento de puestos de trabajo se limitará a 430.000 puestos de trabajo, un 2,5% superior, debido a una moderación del crecimiento en 2017 provocada por la subida del precio del petróleo, el menor impacto de la política monetaria, una menor aportación del consumo de los hogares y la reducción del impulso de la construcción, según estas previsiones elaboradas por Asempleo y Afi, Analistas Financieros Internacionales.

De este modo, el paro se reducirá en 2017 en 1,7 puntos, hasta el 17,8%. En este punto el informe advierte del riesgo de que España se acerque a una tasa de paro del 16%, que el informe considerara estructural, es decir, inevitable, en caso de ausencia de reformas.

Por este motivo Asempleo reclama políticas dirigidas a reducir la tasa de paro estructural donde destacan medidas de defensa de la competencia, de fomento de la productividad y de liberalización del mercado de trabajo.