El pesimismo sobre el futuro se encuentra bajo mínimos. Al menos, es lo que indica el Observatorio Cetelem correspondiente al último mes de 2016. El porcentaje de españoles que consideran que la situación general empeorará disminuyó 3,4 puntos, hasta el 18,9%. Aunque aumentó 0,3 puntos sobre diciembre de 2015.

El 30,9% de los españoles cree que la situación general mejorará. Son 2,7 puntos más que en noviembre de 2016, pero medio punto menos que en el último mes de 2015.

Algo más de la mitad (50,2%) opta por decir que la situación permanecerá estable. Sobre noviembre de 2016 es un avance de 0,7 puntos, y de 0,2 respecto a diciembre de 2015. Un dato que hace bueno aquello de que un pesimista es un optimista bien informado.

Llama la atención que los españoles valoran mejor su situación personal (6,02) que la general del país (4,85). En diciembre de 2016, la diferencia entre ambas aumenta, alcanzando 1,17 puntos. El indicador de la situación personal permanece casi invariable (-0,1 puntos) respecto a noviembre. En el caso de la situación general hay un incremento, 0,03 puntos, lo que sitúa el indicador a niveles de enero de 2016.

Sobre diciembre de 2015, el Observatorio Cetelem registra una disminución de tan solo 0,09 puntos en la valoración de la situación general, mientras sobre la personal mejora 0,08 puntos. Vamos, que tampoco es para tirar cohetes.

Ese mayor optimismo (con todos los matices que se quiera) tiene un efecto negativo: un 38,8% de españoles afirman haber ahorrado en diciembre de 2016, frente al 39% que lo hizo en diciembre lo que significa una reducción de 0,2 puntos, que llega a los 0,4 puntos sobre el último mes de 2015.

Lo peor es que la intención de seguir ahorrando también disminuye: 34,3%, lo que supone1,3 puntos menos que en noviembre de 2016. Aunque si se compara con el dato de diciembre de 2015, hay una mejora de 1,1 puntos porcentuales.

Como estás más optimistas, los españoles están dispuestos a comprar más. ¿Qué? Tecnología/informática, el 21,8%; turismo, 18,7%; textil y deportes, 16,5%; smartphones, 15,7%;  y servicios dentales,15,2%.

Con matices si la compra se hace en Internet o  convencional. En el primer caso, los viajes ganan, 11,3%, seguidos de la tecnoogía y la informática, con el 10%. En el segundo, son los servicios dentales, con el 14,2%, seguidos de nuevo por la tecnoogía y la informática, con el 11,8%.

La cuestión es: ¿somos optimistas porque gastamos más?, o por el contrario ¿compramos más porque somos optimistas? La eterna cuestión sobre qué es antes, ¿el huevo o la gallina?