El estudio, publicado en la revista 'NeoBiota', evaluó la capacidad invasora de la arizónica y encontró que esta especie podría aumentar su potencial invasor, expandiéndose e incluso desplazando a especies forestales nativas como el pino silvestre. La investigación se llevó a cabo en La Pedriza (Madrid) con la participación también de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).

Resultados del análisis

La arizónica muestra una mayor capacidad de regeneración, tasas de mortalidad menores y una mejor respuesta a eventos extremos de sequía en comparación con las especies de pino nativas. Esto sugiere que la arizónica podría encontrar una "ventana de oportunidad" para su expansión en un contexto de cambio climático, especialmente si demuestra una mayor tolerancia que las especies nativas a las nuevas condiciones climáticas, como señaló Enrique Andivia, investigador de Biodiversidad, Ecología y Evolución de la UCM. La arizónica, una conífera originaria de América del Norte, fue introducida en España en proyectos de reforestación debido a su capacidad para adaptarse a diversas condiciones ambientales y tipos de suelo. Sin embargo, a pesar de no estar catalogada como especie invasora en España, este estudio alerta sobre el riesgo de su potencial invasor en un escenario de cambio climático.

Potencial invasor

Los investigadores compararon la capacidad de regeneración y crecimiento de la arizónica con las especies nativas de pino, utilizando técnicas de dendrocronología para estudiar los anillos de los troncos de los árboles y evaluar el efecto del clima y eventos extremos de sequía en su crecimiento. Los resultados de la investigación resaltan la necesidad de implementar medidas para controlar la expansión de la arizónica en los ecosistemas forestales españoles. Por un lado, advierten sobre el riesgo de utilizar especies no nativas en proyectos de reforestación, que podrían convertirse en especies invasoras en un futuro. Por otro lado, subrayan la importancia de gestionar de manera efectiva la expansión de la arizónica para proteger la biodiversidad y la salud de los ecosistemas forestales en España.