La patronal española de fabricantes de vehículos Anfac está velando por el futuro del sector tras la crisis de la covid-19, y entre sus últimas iniciativas ha montado un webinar con el secretario general de Industria, Raúl Blanco, que ha asegurado que España defenderá en la reunión informal de los ministros de Competitividad del viernes en Bruselas a esta industria clave de nuestro país.

La automoción es troncal, y por ello ha asegurado que España pedirá a la Unión Europa que, en el plan de recuperación que ésta elabore por la COVID-19, el 10% del presupuesto se destine a la industria del motor. «No es actuación de lobby, si no racional a nivel económico y europeo», ha defendido Blanco, quien pide una reflexión en el Viejo Continente en serio y que dure años para protegerla.

A nivel nacional, ha abogado por la puesta en marcha de un plan estatal «potente» de ayudas a la compra de vehículos basado en la «neutralidad tecnológica» y no como el último MOVES que dejaba fuera a los motores diésel y gasolina.

Anfac reclama que las ayudas la compra de vehículos se pongan «ya» en marcha. Al respecto, el presidente, José Vicente de los Mozos, ha subrayado la importancia de que exista «ya, y no dentro de meses», un plan de renovación del envejecido parque automovilístico español, ya que, por cada euro invertido en el motor, éste devuelve a las arcas públicas entre 1,5 y 1,8 euros

A su juicio, no ayuda decir que hacen más falta bicicletas o carriles para éstas (en referencia a los planes del Ministerio para la Transición ecológica), porque lo España necesita para seguir siendo el segundo productor de automóviles de Europa, a pesar de no contar con ningún fabricante nacional, es «dar signos a los grandes grupos de que es friendly (amigable) con el sector del automóvil».