Fuente: web del UWC Atlantic College

Desde ayer jueves 19 de agosto, el internado de Gales donde estudiará sus dos últimos años escolares la princesa Leonor, ha abierto sus puertas a los nuevos alumnos que se incorporan este curso para hacer primero de bachillerato. El próximo 30 de agosto comienzan las clases los 350 alumnos de 90 nacionalidades diferentes que cursan sus dos años de Bachillerato.

Con 16 años los alumnos suelen viajar solos hasta el aeropuerto de Heathrow, donde el colegio tiene un servicio de recogida hasta Gales. Que por carretera les supone unas tres horas y media más de viaje. Lo normal es que desde Madrid, Leonor vuele hasta el aeropuerto galés de Cardiff con el servicio de seguridad que el gobierno le haya asignado para su estancia escolar. Que los jóvenes viajen solos no impide que la familia, como su madre Letizia y su hermana Sofía, puedan acompañarla en sus primeros días allí aunque el objetivo es que se adapten rápidamente por sí mismos para comenzar a tope el 30 de agosto.

Fuente: web del UWC Atlantic College

Posiblemente lo más radical para Leonor será compartir estancia con tres chicas. En el castillo hay ocho casas para alojamiento de alumnos. Cada casa independiente aloja a 48 estudiantes, que se reparten en estancias para cuatro. Todos cuentan con un “houseparents” una especie de cuidador de la casa, que les ayuda y les da soporte a los alojados. Y un par de veces al año, hacen una jornada de puertas abiertas y los convivientes, cocinan algo típico de su país. Dado que Leonor “hace sus pinitos en la cocina” no sería raro que se arriesgase con unas tortillas de patatas.

Fuente: web del UWC Atlantic College

Para los nuevos, como Leonor de Borbón o su prima Alexia de Holanda, tienen unos días desde el 19 de agosto, para conocer las instalaciones, profesores, hacerse al nuevo sistema de vida allí y formar sus primeros grupos con los que convivir en el colegio. Leonor madrugará y mucho porque a las siete y media se sirve el desayuno y a las ocho ya estará en clase hasta la una. Cursará las seis materias obligatorias del curriculum que haya escogido, literatura española, física, política internacional, economía o antropología y como idioma, el francés. Un porcentaje muy alto de alumnos, que terminan el bachillerato en el internado de Leonor, se toman un año sabático y otro numeroso grupo se apunta a una universidad norteamericana porque anualmente reciben la visita de más de cien universidades de Estados Unidos para captar a los alumnos. En el caso de Leonor, tendrán que decidir si inicia la carrera militar, como su prima la heredera del trono Belga o si por el contrario, comienza sus estudios universitarios. Su padre empezó por la instrucción militar, ya que algún día será Capitana General de los tres Ejércitos.

Fuente: web del UWC Atlantic College

Las primeras vacaciones las tendrá Leonor el 22 de octubre hasta el 31 de octubre. Y podrá regresar a España para la entrega de premios de los princesa de Asturias en Oviedo. Las siguientes serán para Navidad, del 10 de diciembre hasta el 5 de enero. Y por Semana Santa también regresa del 14 al 24 de abril. El curso termina el 17 de junio. Este sería el calendario oficial. Si por circunstancias de agenda oficial, ya que Leonor comenzó hace un año a tomar parte de algunos eventos, tiene que volver para una lectura de la Constitución, un funeral de Estaso o para presenciar el desfile del día de la Fiesta Nacional el 12 de octubre, pues volvería.

Lo que hace diferente este internado hippie chic de otros, además de no llevar uniforme, es la importancia que le dan al desarrollo personal. De ahí que toda la tarde la dediquen al estudio, a la creatividad, al deporte o a las actividades sociales para la comunidad.

Hay una actividad, fitness natural, que consiste en correr descalzos por el campo para sentir la naturaleza, también pueden hacer cerámica, tejer, escribir en el periódico del colegio por seguir la tradición familiar de los Ortiz, también puede cuidar de los burros, de la huerta, recoger basura en la costa, piragüismo, escalada, tai chi o colaborar en la limpieza de las instalaciones y desde hace 21 años instauraron la costumbre, junto a Amnistía Internacional, de raparse la cabeza a modo de protesta para reclamar justicia para las personas cuyos derechos han sido violados. Leonor no creo que llegué a este extremo, pero sí puede colaborar en la limpieza, en la jardinería del recinto del castillo o atendiendo la tienda solidaria del colegio. Un colmado que se nutre de las cosas que los alumnos que se van les suelen dejar o que les donan algunas empresas o ellos mismos, así sacan un dinerito para ayudar a los alumnos con menos recursos.