Dos escapadas de Estrella Michelin

17/12/2021

Carmela Díaz.

 

Con los premios de esta edición recién estrenados, os descubrimos dos nuevos restaurantes que acaban de ganar su Estrella y que, además, se encuentran en sendos enclaves perfectos para disfrutar de una escapada de mar o de pura naturaleza, respectivamente, repleta de sabores y paisajes inolvidables.

 

Tradición, sabor y buenas vistas. El chef Marcos Granda (coleccionista de galardones Michelin) ha puesto todo su cariño en este restaurante en su lugar de origen, que se encuentra ubicado en un coqueto hotel en Ribadesella, el Villa Rosario. Se trata de un antiguo Palacete ubicado en pleno paseo marítimo, frente al Cantábrico, edificado en 1914 y convertido en una auténtica joya. Es uno de los alojamientos más especiales de la zona. Con la confianza de la familia Fernández, que actualmente regenta el hotel, Granda inauguró Ayalga, en noviembre de 2019, con la misma filosofía que la de sus hermanos mayores Skina y Clos. Y al igual que ellos, también ha conseguido su Estrella. El equipo, tanto en cocina como en sala, es el alma del establecimiento e invita a quienes se sientan en su mesa a ser parte protagonista de una experiencia global basada en el producto, en la materia prima local y siempre de temporada. La relación de confianza con los proveedores de la zona es fundamental en la búsqueda de dicha excelencia.

La propuesta de alta gastronomía transita entre el mar y la montaña, a través de dos menús degustación (Sabores de la Tierrina y Experiencia Ayalga) y se acompaña de una impecable selección de vinos. La cocina fusiona la tradición, el recetario y la despensa asturiana, con un toque creativo. Algunas de las creaciones más destacadas son el mejillón en escabeche; torto de maíz con chorizo a la sidra; extracto de marisco con percebes; chipirón en su propio guiso; pichón en dos cocciones con mole o el solomillo de ternera con huitlacoche.

Naturaleza y cocina tradicional. Ubicado en Torre de Juan Abad, que fue villa de don Francisco de Quevedo, este hotel rural de origen familiar y larga tradición cinegética y culinaria ofrece una completa experiencia de descanso y gastronomía en plena naturaleza manchega. El chef José Antonio Medina, propietario de El Coto de Quevedo, practica en su restaurante gastronómico una cocina creativa y vanguardista, asentada sobre la tradición castellanomanchega pero muy evolucionada. La caza es su punto fuerte. Aparte de las perdices rojas de su finca, se surte de carnes de caza mayor procedentes de la cercana Sierra de Cazorla, que va presentando según temporada, con técnicas inusuales (como desmigados o emulsionados), combinaciones originales y presentaciones actualizadas: así, la perdiz en escabeche y ostras, el ciervo con toffee de castañas, la crema de apionabo con carrilladas de jabalí, las albóndigas de corzo o el crocanti de pistacho de ciervo con crema de albahaca.

Su menú degustación consta de snacks, entrantes, pescado, carne, prepostre y postre; muy buenas la flor manchega con polvo de pisto ahumado; la ensalada de perdiz en escabeche con crema de asadillo de pimiento rojo, manzana Granny Smith y foie; la trucha marinada y ahumada en casa, a la que se añade en mesa una emulsión de sopa castellana; o el cordero lechal asado con salsa de ostras, servido de un gel de ajo negro, trompetas de la muerte y polvo de pistachos. En El Coto de Quevedo también es posible comer a la carta, que va cambiando a lo largo del año con la introducción de platos de temporada como callos melosos de morro, pata y panza o judías estofadas con perdiz o un arroz de matanza y presa ibérica. Pero lo mejor es pernoctar un par de noches en el hotel rural donde se ubica el restaurante para disfrutar de una inmersión total.

¿Te ha parecido interesante?

(+11 puntos, 11 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.