Acuerdo con la Fundación NPH

Santander lucha contra la pandemia en Haití

01:09h

En Haití hay 7.000 personas con COVID-19 y tan sólo 67 camas de UCI para más de 11 millones de habitantes.  Ante esta situación, la Fundación NPH y el Banco Santander han unido esfuerzos en la lucha contra la expansión de esta pandemia en este país, considerado hoy el más pobre de América y el cuarto del mundo. El banco ha colaborado en la adquisición de 300 máscaras de buceo adaptadas por un equipo multidisciplinar de médicos e ingenieros voluntarios españoles tanto para su uso como EPI como para respiradores no convencionales. El propósito de la colaboración ha sido hacer llegar esas máscaras adaptadas al Hospital Pediátrico St. Damien que gestiona la Fundación NPH para la protección de su personal sanitario médico y para el tratamiento de los más de 90.000 niños desfavorecidos y enfermos en el país a los que este Hospital brinda tratamiento médico de alta calidad. “La llegada del COVID-19 en Haití no ha hecho más que empeorar la dramática situación que sufre la población haitiana marginal de Puerto Príncipe. Desde la Fundación NPH, queremos agradecer enormemente este tipo de iniciativas solidarias que nos permiten disminuir la incidencia de morbimortalidad en el país”, afirma Xavier Adsará, presidente de NPH Europa. Enrique Larrainzar, director de Área de Banco Santander, afirma que “saber que podemos ayudar a proteger a quienes ponen en riesgo su salud, así como a las personas más vulnerables en esta crisis sanitaria, nos ilusiona y nos motiva para seguir contribuyendo al progreso de las personas y de nuestra sociedad de forma inclusiva y solidaria”. Las máscaras de buceo han sido testadas en el Hospital Universitario Infanta Leonor de Madrid, gracias al soporte logístico y financiero que ha aportado Banco Santander para la realización de pruebas de seguridad de adaptación realizadas por los facultativos del centro hospitalario. Las pruebas han demostrado que las máscaras pueden ser empleadas como alternativa provisional en ausencia de respiradores convencionales para pacientes con COVID-19 en insuficiencia respiratoria grave y como equipo de protección individual (EPI) en ausencia de instrumentos análogos sustitutivos homologados. El banco ha colaborado con el Hospital en la formación sobre el buen uso de equipos y abastecimiento de materiales tanto para el personal de la Fundación NPH en España, así como para médicos del Hospital Pediátrico St. Damien. El Santander también ha puesto en contacto a la Fundación con dos entidades americanas que permitirán el envío de material y equipamientos médicos para dotar de oxígeno un centenar de camas del Hospital St. Luke de Haití para enfermos graves de COVID-19.   La colaboración con la Fundación se enmarca en el programa de responsabilidad social corporativa de Banco Santander, Fondo Solidario Juntos, a través del cual la entidad ha impulsado un gran número de iniciativas para contribuir a la lucha contra la pandemia de COVID-19, tanto en España como en otros países.