Agosto suele ser un mes malo para el empleo. Y también para la afiliación. La Seguridad Social viene perdiendo 147.000 afiliados de media ese mes en los últimos trece años. Un descenso que este año se suavizó hasta los 99.000. Con todo, la fuga de afiliados se eleva a casi 570.000 personas en los últimos doce meses. Es decir, se han perdido afiliados a un ritmo del 3,4 por ciento anual. Una caída que triplica la sufrida en 2011 y que preocupa a sindicatos y patronal, al recordar que fue entonces cuando se frustró la incipiente recuperación.
La caída de la afiliación en agosto triplica la registrada en el mismo mes de 2011. Con todo, los datos dejan “un buen sabor de boca”, señalan desde Asempleo, una patronal de empresas de trabajo temporal (ETT). “Hay que ser cautos”, matizan. “La caída de la afiliación es todavía tres veces superior a la obtenida en agosto de 2011, cuando España estaba abandonando la primera recesión”.
A pesar de la distancia, España cuenta con algunas ventajas en esta ocasión. A diferencia de 2011, “las condiciones exteriores son ahora más favorables”, señalan desde Asempleo. Y eso propicia la “salida progresiva de la crisis”, concluyen.
Una visión contraria sostienen desde Comisiones Obreras. El sindicato pide “prudencia” al Gobierno y señala que “el descenso del paro registrado no es motivo para pensar que se ha iniciado una recuperación”. “En el año 2011 también se produjo una mejora de las expectativas en los indicadores económicos que quedó diluida al año siguiente”, subrayan.
“Seguimos manteniendo aspectos preocupantes como son el endeudamiento del sector privado; la alta tasa de morosidad; un sector bancario que sigue sin dar crédito; unas exportaciones que, aunque evolucionan de forma positiva, no son suficientes para tirar de la economía; y una escasa demanda interna”, afirman desde CCOO.
Tercera destrucción de empleo en el año
La caída de afiliados a la Seguridad Social en agosto trunca la serie de alzas, iniciada en marzo. En esos cinco meses, la Seguridad Social logró ganar casi 275.000 afiliados. En un solo mes, agosto, se han perdido cerca de 100.000. Sin embargo, en los tres años anteriores, la pérdida de afiliados superó ampliamente esa cantidad, en un 30 por ciento, al superar la caída los 130.000 afiliados en el mes de agosto de cada año.
El descenso de agosto supone la tercera ocasión en que se destruye empleo en 2013. Sin embargo, la estadística aparece distorsionada. El año pasado el Gobierno excluyó de la Seguridad Social a los cuidadores no profesionales de la Dependencia. Sin contar su salida, la pérdida de afiliados anual se queda en un 2,4 por ciento, en lugar del 3,4 por ciento apuntado.
Con todo, para UGT, la pérdida de afiliación a la Seguridad Social demuestra “una situación de desánimo en la sociedad”. “Hay muchas personas que no van a registrarse en el desempleo porque no tienen ningún tipo de expectativa”, afirma el ‘número dos’ del sindicato, Toni Ferrer, tras conocer los datos de desempleo y afiliación.
En cuanto al empleo creado, Asempleo señala que la cifra de contratos prácticamente iguala a la del año anterior. Sin embargo, un 94 por ciento de estos compromisos son de naturaleza temporal. Habrá que ver cómo evolucionan las cifras del desempleo en los próximos meses. Respecto a los contratos indefinidos, continúa el hundimiento, aunque se suaviza su caída; desde el 20 por ciento anterior, al 16 por ciento de agosto, señalan desde la patronal de las ETT.
Para UGT, se trata de “la situación más baja de la serie histórica en materia de contratación indefinida, lo que nos muestra la dimensión puramente estacional del empleo, vinculada a la campaña de verano”, concluye Ferrer.
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