¡¡Quien nos iba a decir que el Ibex se iba a convertir en la estrella!! ¡¡Y justo en el momento en el que el mercado se encuentra sumido en un mar de dudas!! En estas condiciones, el selectivo español solía destacar hace unos meses pero por el lado contrario. Era el que más caía con diferencia.

Ya sé que me dirán que es que el Ibex es un índice extremo y llevarán razón en parte. Pero ya les contaba ayer que esta vez todo parece ser diferente. La mejora evidente del Ibex viene apoyada por datos macroeconómicos que, creíbles o no, el mercado considera positivos y que han provocado un cambio de percepción bastante evidente en los inversores institucionales internacionales.

Hoy lo ha vuelto a demostrar. Mientras el resto no lograba salir del mar de dudas en que se han sumido por el techo de gasto americano, por la retirada de estímulos por la Fed y por la espera a un gobierno en Alemania, el Ibex ha vuelto a cabalgar en solitario, superando incluso a un Mibtel italiano que debería haber hecho algo más tras publicarse su mejor dato de confianza del consumidor en 27 meses.

Sube y sube con ganas. No mira atrás. Parece tener potencia y decisión…

Estos atributos le pueden llevar al éxito o al gran batacazo, pero visto lo visto, casi que prefiero que el batacazo se lo de por haber sacado los pies del tiesto que por haber seguido en el plan remolón en el que lleva desde que en 2010 perdió el sincronismo con Wall Street. De momento, el Ibex ha marcado hoy nuevo máximo anual: 9.242,9 puntos

En el otro extremo, me preocupa que el FTSE lleve ya unos días acomodado en las leves pérdidas y sin capacidad de reacción. Cuantitativamente, no es nada grave aún ya que todo el movimiento se produce en un rango de apenas cien puntos, pero cualitativamente preferiría ver algo más animado a uno de los índices que más tienen que decir en Europa a pesar de no estar en el Euro.

Como de costumbre, esperar y ver.

Al cierre, el Dax subió un 0,01%, el FTSE se dejó un 0,30%, el CAC un 0,01% y el Ibex avanzó un 0,82%. Ya lo ven. El Ibex se destaca y el FTSE lastra.