La vela que han dejado al cierre los índices americanos es fea de solemnidad, con una sombra por encima y un cuerpo en rojo, justo en zonas de máximos. Como si anunciara que de nuevo el S&P 500 va a ser incapaz de romper la resistencia que tiene en la zona de máximos históricos.

Sin embargo, subieron más valores que bajaron, lo que es mucho más apreciable aún en el Nyse que en el Nasdaq. Pero para liar más la madeja, si medimos en volumen, el de los valores a la baja y el de los valores al alza estuvieron prácticamente parejos. Por tanto, medido en valores, el mercado aparece fuerte y medido en volumen, tiene dificultades para decantarse por alcistas o bajistas. Y si lo medimos en perfil, la vela es claramente negativa.

¿Se pueden enviar señales más contradictorias al mercado? Seguramente sí. Sólo habría que mirar en terceros viernes de mes anteriores para intentar buscar cosas tan raras.

Me dirán que hoy no vencían futuros, y llevarán razón, pero todos los terceros viernes de mes vencen opciones, lo que es más que suficiente para descabalar el mercado. De hecho, los poderosos hace tiempo que dejaron de trabajar con acciones y se decantaron por las opciones por su mayor flexibilidad, por las infinitas posibilidades de estrategias que ofrecen y sobre todo por el enorme atractivo de su relación riesgo-beneficio.

El caso es que Wall Street comenzó subiendo y terminó bajando. Poco, pero bajando lo suficiente como para llevar de nuevo el desasosiego a los que esperan la señal del S&P 500 para lanzarse al mercado en el lado largo.

Pero no se crean que las dudas se encuentran en el lado largo exclusivamente. Imagino que nadie en su sano juicio puede suponer que lo sucedido en la sesión de hoy certifica la falta de fortaleza del S&P 500 y por tanto se podría pensar en entrar cortos.

Una vez más, lo sucedido hoy necesita de confirmación en lo que suelo llamar «una sesión normalizada», que bien podría ser la del lunes. No sería la primera vez que el vencimiento de opciones lleva al mercado a lugares y posiciones que luego no son ratificados. Wait and see, que dicen en Wall Street.

Al cierre, el Dow Jones se dejó un 0,19%, el S&P 500 otro 0,19% y el Nasdaq Composite un 0,10%. En realidad, poca cosa en términos cuantitativos, pero significativa por la zona en la que estamos y el perfil de la sesión.