Mientras los directivos de Orange han destacado que una posible filtración de la Oferta Pública de Adquisición (OPA) a Jazztel disparó la cotización de las acciones de la empresa presidida por Leopoldo Fernández Pujals, el segundo accionista de esta empresa, el fondo Alken, que cuenta con más del 5% del capital, rechaza en principio la oferta realizada por la operadora francesa. Los 13 euros por acción, que suponen valoran la compañía en más de 3.330 millones de euros, no parece a los gestores de esta institución de inversión colectiva una cifra suficiente para ser aceptada.

El efecto que pueda tener esta posición es aún imprevisible, ya que podría arrastrar a otros accionistas. El acuerdo alcanzado entre la empresa francesa y el empresario de origen cubano, que tiene el 14,5% del capital, podría no ser suficiente, por más que él pueda lograr el apoyo de otros socios de la compañía.

¿Qué lleva a Alken a tomar esta decisión? Todo apunta a que estiman que el precio se puede elevar por la importancia estratégica de Jazztel para la teleco que quiere convertirse en el segundo operador del mercado español, y también porque las sinergias pueden ser más elevadas. Esa cuestión será más importante que los cálculos hechos en base a los beneficios, Ebitda o deuda.

Sin embargo los analistas aconsejan a los minoritarios que acudan a la OPA, ya que el precio que va a pagar Orange, además de estar impulsado por movimientos que ahora investiga la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), es un récord en la historia bursátil de Jazztel, nunca lo había alcanzado.