«Existen luces y sombras en unos resultados donde el denominador común lo pone la mejora económica, que se traduce en menores saneamientos y una reducción del coste del riesgo que impulsa al alza los beneficios». Es la principal conclusión del análisis de José Luis Cortina, presidente de la consultora Neovantas, sobre las cuentas de los grandes bancos en los nueve primeros meses.

Hasta septiembre, el beneficio de las grandes entidades crece el 37% pese al deterioro del 15% en el margen de intereses. Cortina destaca que el esfuerzo en la contención de costes por parte de las entidades impacta en una mejora generalizada de la eficiencia, situándose los gastos en el 45% de los ingresos. Además, la progresiva reducción del coste de riesgo se refleja en el menor volumen de dotación a provisiones, un 20% menos frente al tercer trimestre de 2014.

El incremento de la rentabilidad hasta niveles de doble dígito, para compensar el coste del capital (actualmente, entre el 8% y el 10%), el aumento de la eficiencia y la adaptación al nuevo entorno digital son los principales retos para la banca.

«Ante estos datos», indica José Luis Cortina, «la banca se enfrenta a tres grandes retos. El primero, la rentabilidad. Para ello, en los próximos ejercicios será fundamental impulsar la captación de crédito, ajustar la estructura de costes, e impulsar la venta cruzada con los productos fuera de balance”.

“En este sentido, quien no sea capaz de responder a las exigencias de capital de sus inversores y a los requisitos de solvencia de los reguladores, acabará expuesto a posibles fusiones que garanticen una estructura rentable y solvente», subraya el presidente de Neovantas.

En clave de negocio, el fortalecimiento del negocio minorista es uno de los factores clave de la rentabilidad para lo que queda de año y para 2016. Por el lado del activo será fundamental acelerar la concesión de créditos, buscando el crecimiento de los volúmenes de nueva producción con unos márgenes más estables y con el impacto positivo del descenso de la morosidad en las carteras antiguas.

Por el lado de los recursos de clientes, los productos fuera de balance continuarán creciendo a tasas elevadas, destacando los fondos de inversión y los planes de pensiones. “Este incremento está motivado por la búsqueda de mayor rentabilidad por parte de los clientes en el contexto de baja remuneración de los depósitos a plazo y está incrementando la partida de comisiones en la cuenta de resultados”, explica Cortina.

Mejora de la eficiencia

El segundo reto es la eficiencia. Todos los bancos la mejoran respecto a septiembre de 2014. Para el presidente de Neovantas, “es importante el ajuste de capacidad instalada de la banca española, la mayor frente a sus comparables europeos, con una reducción del 27% de la plantilla y un 31% menos de oficinas desde 2008”.

Pero esa reducción de la capacidad instalada debe ir “acompañada por un reenfoque necesario en la estrategia de las redes de oficinas, que necesitan reforzar su valor como activo estratégico de las entidades, optimizando su papel en la experiencia de cliente y su potencia comercial para impactar en el eje de ingresos de la entidad”, subraya Cortina.

El tercer reto para la banca es la multicanalidad y la transformación digital. En la actualidad su impacto en los resultados de las entidades es poco relevante, pero su relevancia en los próximos años “exige mover ficha”, según el presidente de Neovantas.

«La digitalización de los servicios es un camino que la banca ya ha iniciado. Se está produciendo un profundo progreso en la relación entre el cliente y la banca. Los nuevos canales de comunicación, su implantación y maduración, son un desafío en el cual todo el sector de banca minorista se encuentra ya inmerso en busca de nuevas soluciones», concluye José Luis Cortina.