Normalidad democrática, claro

21/06/2011

diarioabierto.es.

Si Dios no lo remedia, que parece que no porque Dios –como Franco-  no se mete en política, Extremadura quedará en manos del PP, gracias a la decisión de IU de abstenerse en la votación. IU es soberana. Y vaya por delante mi respeto a sus decisiones.

Pero, como uno tiene también derecho a opinar, me parece poco justificadas las razones que da IU para dejar el camino expedito al PP. Dice IU que hasta ahora el PSOE ha llevado a cabo una política de derechas, de lo que cabría deducir que esperan que el PP la haga de izquierdas.

También soto voce aseguran que siempre queda la posibilidad de una moción de censura, si el PP se desmarca de sus compromisos. El problema es que el ideario del PP y sus compromisos difícilmente encajan con los de IU, con lo que la moción de censura habría que hacerla al día siguiente de la investidura. Ya ha advertido Fernández Vara que no se puede jugar con estas cosas. Y, además, que esa misma posibilidad la tendrían también con un ejecutivo socialista.

Tal vez IU de Extremadura tendría que considerar las primeras decisiones anunciadas por la nueva presidente de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal: eliminar instituciones que, curiosamente, son las que tienen una cierta labor de control sobre su gobierno: El Consejo Económico y Social, el órgano de control de cuentas y el Defensor del Pueblo. Sus efectos sobre el ahorro van a ser mínimos.

No me rasgo las vestiduras, en cualquier caso. Porque, en el fondo esto es normalidad democrática. El problema es cuántos votantes de IU –entre los que me cuento-  considerarán que no dieron su voto para que el PP asuma el poder.

Por muy malos que sean los socialistas –que lo son- habrá que convenir que sus postulados estarán siempre más cercanos a IU que los del PP. ¿O no? Pero, en fin, que Dios reparta suerte.

Mal día para la izquierda. Malos tiempos éstos cuando a estos problemas domésticos se unen los de una Europa que parece resignada ya a olvidar sus postulados sociales y se refuerza como la Europa de los mercaderes y el dinero. Y, mientras, el 15.M se consolida, se refuerza en una angustiada lucha por cambiar las cosas. Que los dioses los ayuden. Ya no son cuatro jóvenes perroflautas. Son miles de hombres y mujeres, cercados por sus hipotecas, por el paro, por la desesperación. Y que cada día encuentran un nuevo objetivo, un nuevo sentido a su lucha.

De Octavio Paz estos versos:

Dame, llama invisible, espada fría,
tu persistente cólera,
para acabar con todo,
oh mundo seco,
oh mundo desangrado,
para acabar con todo

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2 pensamientos en “Normalidad democrática, claro

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