Podríamos desgranar una retahíla de cifras sobre lo que ha caído el sector de la restauración, no sólo en ventas sino también en número de establecimientos pero nos consta que será consciente de que muchos de los restaurantes y barrios que conoce han cerrado. Crisis obliga. Pero no queremos hablar de esto sino de otros locales que abren, precisamente ahora que estamos en tiempo de vacas flacas. Y lo hacen aprovechando el momento y apostando por un concepto poco explotado: el bar low cost.

Así podríamos denominar a Copas Rotas, una cadena (ya cuenta con varios locales distribuidos por la geografía española) donde todo, absolutamente todo, cuesta un euro: el café, la coca cola, el montadito… Las copas suben un poco más, pero poco: 4 euros en Madrid (donde los precios de las mismas superan los ocho euros o incluso los diez, según el establecimiento).

¿Cuál es su secreto? No es que jueguen con la calidad, sino que compran grandes cantidades lo que les permite apurar en los precios de venta al público: “Llevo 17 años en el sector de la hostelería cuando abrí el primero de estos locales en octubre de 2010. Resulta que el local que estaba al lado del bar que teníamos en Oviedo se quedó vació y decidimos hacer esto”, comenta Sergio, cabeza pensante que está detrás de Copas Rotas. Empezaron ofreciendo los montaditos a un euro. Y después, todo lo demás. Como la cosa empezó a funcionar, abrieron un segundo local en su zona de proximidad, en Gijón. Y el proyecto se empezó a consolidar: “Actualmente tenemos 13 abiertos, el último lo hemos inaugurado en Alicante. ES probable que terminemos el año con 20 locales, cuatro de ellos propios”, especifica Sergio, quien reconoce que hay seis personas interesadas en abrir franquicias en Madrid (donde ya existe su establecimiento). “El ticket medio no ha dejado de bajar en el sector, aunque se nota más en los restaurantes que en los bares. La gente sale, pero consume menos. Hay proveedores que están facturando lo de hace tres años por eso era importante darle a la gente una alternativa de ocio en estos tiempos”, dice.

No sólo es que ofrezcan mojitos a precios sin parangón, es que sus locales tocan todos los palos: abren de 8 de la mañana hasta el cierre por la noche, que en algunas ciudades puede ser las tres de la mañana.