El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, acudía a la Cámara de Comercio e Industria de la localidad catalana en la que nació la entidad teóricamente para dar una conferencia sobre las perspectivas económicas para 2013. Como suele suceder, el discurso dio más juego al final, cuando llegan las preguntas ligadas a cuestiones de la máxima actualidad. Ante las especulaciones sobre un retraso de la subasta de CatalunyaBanc (la entidad que recibió el negocio financiero de la caja creada por la fusión de las caixas de Catalunya, Tarragona y Manresa) por parte del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), supuestamente para “no malvenderla”, el Sabadell ha dado un paso al frente. Oliu ha confirmado que, pese a la adquisición a BMN de las sucursales y el negocio de Caixa Penedès en Cataluña y Aragón, quiere crecer en su territorio de origen.

«Continuamos interesados en presentar una oferta competitiva”, afirma Oliu, que precisa que no tomará una decisión definitiva hasta que no analice las condiciones de la venta de Catalunya Banc por parte del Frob.

En un gesto elegante, el presidente del Sabadell admite entender que el Frob pueda decidir un retraso en la subasta de Catalunya Banc más allá del primer trimestre del año, fecha inicialmente prevista, para evitar malvender la entidad nacionalizada una vez ha sido saneada.

Pero también deja muy claro que la estrategia del Sabadell es continuar la consolidación de su presencia en Cataluña (donde era el sexto banco antes de esta operación, y donde el BBVA se ha hecho con Unnim) y en el resto de España (donde logró el Banco CAM), aprovechando la reestructuraciín del sector financiero español.

Un 15% más de ajuste para la banca

Pero Oliu lanza más mensajes. Uno, dirigido a sus colegas. El presidente del Sabadell considera que la reestructuración del sistema financiero español aún no ha concluido y que el número de oficinas deberá reducirse aproximadamente un 15 % en los próximos años. La plantilla sufrirá, en el mismo período, un ajuste de entre el 10% y el 15%. «De las 16 entidades que hay actualmente, ya veremos cuántas quedarán«, pronostica

Otro mensaje tiene un componente claramente político, aunque Josep Oliu se refiera a la estrategia de expansión. El Banco Sabadell «es un proyecto español, no catalán«. Y en el mercado español, como en Estados Unidos (el único país en el que tiene una presencia directa), el grupo «aún tiene mucho trabajo que hacer».

Tercer mensaje: comienza la expansión internacional, sin prisas pero sin pausa y, sobre todo, sin fechas. El grupo Sabadell «empezará a mirar algún país emergente para diversificarse«.