El vicepresidente de la Comisión Europea y Comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha instado a seguir en Europa con las reformas del mercado laboral para que sea equilibrado y poder acabar con los obstáculos a la creación de empleo.

En un acto con motivo del 40 aniversario de la Confederación Europea de Sindicatos, Rehn defendió que aquellos que hayan perdido su trabajo puedan contar con apoyo para volver al mercado laboral o se puedan formar, y subrayó que las reformas deben respetar la importancia del convenio colectivo y los derechos de los trabajadores.

El vicepresidente de la CE destaco que la perdida tan grave de competitividad que ha tenido lugar durante la crisis en algunos países ha dado lugar a un paro estructural «preocupante» y subrayó que las cifras de desempleo son «inaceptables», especialmente en el caso del paro juvenil.

Precisamente Olli Rehn, se mostró, en declaraciones a su llegada a la conferencia, «muy preocupado» por la alta tasa de desempleo en España, especialmente entre los jóvenes, que supera actualmente el 55%.

Volviendo a su intervención, Rehn recalcó que los sindicatos han desempeñado un papel «crucial» en el proyecto de construcción europeo y afirmó que tienen una «contribución importantísima» que hacer en los esfuerzos actuales para salir de la crisis.

En su opinión, las reformas que necesita Europa estarán mucho mejor diseñadas y aplicadas una vez que haya diálogo auténtico entre los interlocutores sociales y recordó que el diálogo social constructivo ha sido «clave» en gestiones de crisis y en muchos cambios sociales que se han producido en Europa.

«Europa tiene que volver a recuperar su trayectoria y acabar con esta alarmante curva creciente de pérdida de empleo; y en este contexto los sindicatos tienen un papel crucial y una responsabilidad», destacó.

Así, aseguró que la Comisión Europa está «lista ya» para llevar a cabo un diálogo genuino con los sindicatos europeos, con los que afirmó compartir una agenda común y la búsqueda de un mayor crecimiento creando empleo.

En este sentido, subrayó que el organismo europeo está a favor de una Europa social y en contra de que se ataquen los derechos de los trabajadores. «Vamos a defender la Europa social en todas nuestras acciones», aseveró.

No hay margen para la complacencia

El vicepresidente de la Comisión Europea y Comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, incidió también en que no hay «margen para la complacencia» pese a las mejoras en los mercados porque «la crisis y los desafíos son muy grandes».

Rehn recalcó que la crisis actual no es coyuntural, sino que tiene una vertiente de deuda tanto pública como privada, «empezando por España».

Rehn admitió que todo el mundo sabe que las cosas «no van bien en Europa» y que los efectos sociales de la crisis son «muy acuciantes» y lo están sufriendo los sectores más desfavorecidos de la sociedad. «La crisis ha tenido unas consecuencias sociales y humanas trágicas para todos los ciudadanos», remarcó.

En su opinión, las raíces de la crisis están en los «desequilibrios acumulados en la última década» y ahora se está haciendo un gran esfuerzo en toda Europa para corregirlos.

Además, destacó que la economía europea presenta en la actualidad una «imagen dual», ya que mientras la economía real sigue estancada o en recesión, la situación en los mercados ha mejorado y parece que se aflojan las tensiones.

El comisario europeo recalcó que la crisis ha sacado a flote no solos «fallos políticos, sino también debilidades estructurales» en Europa.

En concreto, incidió en que la reglamentación financiera no ha estado a la altura del desarrollo económico, pero actualmente, de forma acertada aunque «subrepticia», se están intentando resolver esas deficiencias.

Por otro lado, Rehn señaló que las medidas de estímulo y los planes de recuperación económica han ayudado a amortiguar un poco los primeros golpes tras el estallido de la burbuja, pero «no han podido remediar la situación».

Fortalecer la cooperación

En este contexto, destacó que un paso importante debe ser fortalecer la «cooperación económica», para lo que la CE ha instado a dar pasos hacia una unión económica y monetaria «genuina», que fomente el crecimiento.

Sin embargo, incidió en que aunque esto es una condición «esencial para que haya crecimiento y creación de empleo», no es suficiente, ya que hay que hacer frente a la perdida de competitividad en algunos países. «Hay que invertir esta tendencia menguante de la competitividad, restaurarla», añadió.

Rehn remarcó que para lograr crecimiento y mantener el sistema actual es necesario «adaptarse» para que se mantenga los cimientos del modelo económico y social europeo y hacer frente a los desafíos a largo plazo, como el envejecimiento o el cambio climático. Sin embargo, recalcó que al mismo tiempo es necesario seguir con la consolidación fiscal, ya que «cada vez estamos más endeudados»

Así, advirtió de que el elevado desempleo, el alto nivel de endeudamiento público o el envejecimiento de la población, entre otros factores, ponen de relieve lo «cara» que supone la productividad de la economía europea y sostener el modelo económico.

En este contexto, instó a poner en marcha reformas en favor del Estado del Bienestar y que apoyen la recuperación del tejido industrial europeo, como, ejemplo, apoyar la innovación, la investigación, recuperar el flujo de crédito a hogares y pymes (sobre todo en España) o recuperar la inversión pública.

Por otra parte, reconoció que existen diferencias entre el Norte de Europa, donde prima la cultura de la estabilización como propuesta diseñar el futuro de la UE, y el Sur, donde se defiende la mutualización.

El vicepresidente de la CE incidió en que no existe «una bala de plata que resuelva de un disparo la crisis», por lo que remarcó que es necesario combinar ambas políticas para que haya unión con mayores responsabilidades y mayor solidaridad, que creen la base para la mejorar del crecimiento y el empleo.

Advertencia a Cameron

Sobre la propuesta del primer ministro británico, David Cameron, de realizar una referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea (UE) Rehn dijo que «la UE no es una cafetería a la carta donde cada uno puede coger los elementos de lo que quiere».

El vicepresidente de la CE recalcó que es cosa de cada país el decidir hacer un referéndum, pero incidió en que la UE tiene unas reglas y unos principios comunes a los que hay que atenerse.

En esta línea, añadió que los diferencias no se consiguen superar «sólo amenazando con irse de la UE», y aseguró que él, si fuera ciudadano británico, pensaría que es mucho mejor estar «en el centro del campo que en los laterales».