El presidente boliviano, Evo Morales, ha anunciado este lunes la nacionalización de la empresa Servicios de Aeropuertos Bolivianos (Sabsa), filial de las compañías españolas Abertis y Aena, según ha informado la agencia oficial ABI.

Según la agencia, los ejecutivos de Sabsa se resistían a incrementar la inversión de su propuesta inicial de 36 millones de dólares en el mantenimiento y ampliación de los aeropuertos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz en los próximos nueve años, lo que habría llevado al Gobierno a analizar seriamente la nacionalización.

En 1999, Sabsa pasó a formar parte de TBI, una empresa con sede en Londres que gestionaba aeropuertos en distintos países del mundo. Posteriormente, según informa la empresa en su web, TBI fue adquirida en 2004 por Abertis-Aena, que constituyó entonces Abertis-Airports, de quien dependía actualmente la empresa boliviana.

Según ha indicado el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Vladimir Sánchez, Sabsa incumplió con el proceso de inversión que había acordado con el Gobierno boliviano. «Nosotros creemos y tenemos toda la justificación (para demostrar) que la empresa ha incumplido en el proceso de inversión y que podía hacer más inversión», ha afirmado Sánchez, según recogen los medios locales.Sánchez ha explicado que su ministerio mantuvo reuniones con los directivos para negociar la cantidad que iba a invertir la empresa para la ampliación de las infraestructuras de los tres aeropuertos internacionales del país.

El decreto gubernamental deja claro que «los contratos suscritos por Sabsa con terceros para realizar sus operaciones continuarán vigentes pero serán analizados ‘caso por caso’ y ratificados o dejados sin efecto previa emisión del informe respectivo».

Esta expropiación se une a otras anteriores, que afectaron a Red Eléctrica de España (REE) y a Iberdrola. Morales decretó a finales del pasado año la nacionalización de las cuatro filiales con las que operaba Iberdrola en el país latinoamericano -dos distribuidoras de electricidad en las regiones de La Paz y Oruro, una empresa de servicios y una gestora de inversiones-  con la acusación de que cobraban más del doble a los consumidores de las zonas rurales.

Se trataba además de la segunda nacionalización que tenía como meta una empresa española en menos de ocho meses en Bolivia. En mayo de 2012, Morales expropió la firma Transportadora de Electricidad, de Red Eléctrica.

Ante la nacionalización que afecta a AENA y a Abertis, el Gobierno ha anunciado este lunes que se replanteará todas sus relaciones con Bolivia, según ha manifestado el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, quien tratará además de lograr el apoyo de sus socios de la UE.

En un comunicado, Exteriores indica que la expropiación «sin previo aviso y por la fuerza» supone un «acto inamistoso que se suma a medidas similares emprendidas en meses recientes contra otras empresas españolas en Bolivia».