Cada coche era inspeccionado con una especie de aspirador por la policía nacional y eso provocaba el gran atasco.  2.000 invitados convocados a la fiesta de la gala del cine español no podían llegar a esa ciudad hotel de carretera con auditorio, nada más que por carretera. Superado ese handicap, la alfombra volvía a recuperar su color rojo, de ahí el nombre en inglés al que se dedican hasta colecciones de alta joyería,  «Red Carpet», los patrocinadores que condicionaban su color y sus logos,en la 27 edicion de los Premios Goya,han desaparecido.

Por unos 25 metros de alfombra, por los que era difícil evolucionar con los Ursula Mascaró que muchas de las damas lucían, fueron pasando los actores y actrices requeridos por los periodistas, el resto de invitados lo hacia por otro pasillo, sin alfombra y franqueado por las portadas de Yo Dona,con la produccion de moda cuyo guión firmaba Angeles Gonzalez-Sinde y la portada la ocupaba Marta Etura, miembro destacado de la Academia de cine, que minutos antes de la gala no estaba relajada precisamente, temiéndose el manifestódromo en el que se convertiría la ceremonia de entrega de premios . Si hay que dar un Goya al mas destacado de la alfombra, sin duda, sería a un trío; Carmina Barrios, con un Marina Rinaldi, su hija Maria Leon y su hijo Paco Leon, dedicaron tiempo y sonrisas para todos,sin necesidad de tomarse una tortilla de trankimacines ni de hiperventilar por ver tantos periodistas, es q ellos son asi, normales. Lo contrario que Javier Bardem, que solo habló con varios informativos de televisión previamente pactados, hizo sólo un fotocol, de los dos que había y a los del otro lado, los ignoró. Los Bardem formaban comitiva con su hermano Carlos y la matriarca, Pilar. Javier Bardem y el ministro Wert fueron los dos meteoritos de la noche.

Michelle Jenner que se dedica en cuerpo y alma a grabar Isabel y estaba bellisima con su Andrew Gn, compensó la acritud Bardem. Un rato de risas con Candela Peña, que llevaba un traje «dificil» con bolsillos de David Delfin y acabamos hablando de fajas y de lo necesarias que son con segun que trajes….y eso que ella tiene buen cuerpo «porque mi marido es entrenador pero hoy sí la llevo puesta hasta los pies». La Alta Costura la puso Nieves Álvarez, con un Stephan Rolland sencillamente perfecto, ella a pesar de haber recibido tres propuestas para hacer cine, seguirà diseñando ropa de niños con las Villalobos. El desproposito de la alfombra,lo ponia Ana Garcia Obregon, que cada uno saque sus conclusiones y si quiso llamar la atencion,sin duda lo consiguió. Marisa Paredes, acompañada por su hija,contaba que acababa de llegar de Alemania de rodar una pelicula alli y que incluso,le habia servido para aprender algo de alemán y estaba relajada porque acudía en calidad de miembra de la Academia de cine, pero reivindicativa;»al ministro Wert hay q pedirle que mejore la educación y que de mejores becas». Sin duda,el paseo mas glorioso el de Concha Velasco «yo no estoy nerviosa porque sé que me lo van a dar, pero si emocionada y agradecida». Y si las damas calzaron los Mascaró, sin dudarlo, se aderezaron en su mayoría con las joyas de la noche las de Carrera y Carrera, no de forma voluptuosa como en Hollywood, sino elegante. TVE hizo la cobertura de la gala y eso se notaba en sus condiciones de trabajo, uno de los 59 salones, el más amplio, lo ocupaban ellos. A continuación las radios, que tenían sus mesitas para ir recibiendo a los ganadores del Goya y finalmente, el batiburrillo de fotógrafos y redactores, hacinados en un espacio imposible que no tenía sillas suficientes ni casi oxigeno para respirar. Este año no ha sido fácil para el cine y tampoco para el resto, pero eso no requería tratarnos como si fueramos parte de un cursillo de amansamiento, no somos fieras aunque nos traten como a ellas.

Acabada la ceremonia ,entre emocionante y reivindicativa,con muchas alusiones a recortes, sobres, crisis y corrupcion, los invitados se desplazaron, en enormes autobuses y todos los taxis posibles, al centro de Madrid concretamente al Casino, eran las dos y media de la madrugada cuando llegaban Marisa Paredes, los Bardem, Marta Etura o Juana Acosta. Allí unos 1600 invitados pudieron disfrutar con la produccion de moda de Yo Dona que decoraba el bello edificio de la calle Alcala de Madrid y la musica del DJ Play Music Madrid, que siguió poniendo ritmo a la noche del cine.