El déficit comercial cayó un 33 por ciento en 2012 respecto al año anterior, hasta los 30.757 millone. La suma resulta de un crecimiento de las exportaciones del 3,8 por ciento. Pero también de la caída del 2,8 por ciento en las importaciones. La tasa de cobertura, es decir, el porcentaje de importaciones ‘pagado’ con las ventas al exterior, rozó el 88 por ciento. “Un datos sin precedentes desde que hay registros”, afirmó el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz.

Las exportaciones crecieron hasta los 222.643 millones impulsadas por la venta de bienes de equipo, alimentos, productos químicos y automóviles. Según Legaz, se trata del volumen de ventas más alto de la historia. Un crecimiento que bate al de países como Alemania (3,6 por ciento), Francia, (3,1 por ciento) y Japón (2,8 por ciento).

Mientras, las importaciones disminuyeron hasta los 253.401 millones de euros. Sin embargo, en este apartado continúa disparada la factura energética, que creció un 11 por ciento, hasta rozar los 62.000 millones.

Legaz destacó el empuje de las exportaciones fuera de la UE. En particular, crecieron las ventas a América del Norte (13,5 por ciento), América Latina (14,9 por ciento), Asia (11,9 por ciento) y África (30, 6 por ciento). Y cayeron a la Unión Europea (-1,3 por ciento), y Zona Euro (-2,7 por ciento).

La balanza comercial viene mejorando en los últimos años. Así, la tasa de cobertura ha pasado del 64 por ciento en 2006, al 87,86 por ciento en 2012.

Pese a todo, Economía admite que una parte de esa mejora se explica por la atonía del consumo , que hace caer las importaciones. “Es evidente. Pero no lo explica todo”, afirma Legaz.

“Además de la caída de la demanda interna, se está produciendo una sustitución de productos importados por productos españoles”, agregó.

Reforma laboral y competitividad

Con todo, Legaz sostuvo que, en las exportaciones españolas, cada vez tienen menor importancia el factor precio. Sin embargo, opinó que la reforma laboral ha mejorado la competitividad, por la vía de la “moderación salarial”, como en el reciente convenio de grandes superficies, cuyos trabajadores han aceptado rebajas salariales a cambio de mantener el empleo.

Según Legaz, el sector exterior aportó 2,5 puntos al crecimiento de la economía en 2012. “Ha sido el gran amortiguador de la crisis”. “Si se hubiera comportado de otra manera, el PIB podría haber caído un 4 por ciento”, agrega.

“España ya no se endeuda con el exterior”, concluyó, en referencia al saldo positivo de la balanza de pagos, que se logró en agosto. Cuando esto se ha conseguido, históricamente, la economía ha vuelto a crecer “en uno o dos años”, sentenció.