La nadadora española Mireia Belmonte reconoció su sorpresa por «los buenos resultados» que ha conseguido en los Mundiales de Piscina Corta, que se han celebrado en Dubai y donde se ha adjudicado cuatro medallas, tres de ellas de oro (200 mariposa, 200 y 400 estilos).

«La verdad es que no esperaba tan buenos resultados. Iba a Dubai con el objetivo llegar a todas las finales que pudiese y salió todo rodado», señaló Belmonte en rueda de prensa en el aeropuerto de Barajas tras aterrizar de Dubai.

Además, de los tres oros en pruebas en la que es una especialista, la de Badalona se llevó una plata en los 800 metros libres, una distancia que no nadaba desde hace mucho tiempo. «Nadé bien en todas las pruebas, pero en los 800 no esperaba hacer tan buen tiempo ni acabar segunda. Empecé bastante lenta, pero poco a poco fui avanzando y estoy muy contenta por esta plata», aseguró.

Finalmente, la catalana descarta que estos grandes resultados signifiquen más presión. «No pienso en eso porque no me favorece. Antes de nadar siempre pienso que lo voy a hacer lo mejor posible y no en nada más porque es una presión extra y me puede perjudicar», sentenció.

Por su parte, Erika Villáecija, nueva campeona del mundo de los 800, recalcó que una de las claves es que el ambiente en la selección respecto a otros años ha cambiado. «Por nuestra parte, estamos más unidos, nos alegramos de los éxitos ajenos porque nuestro deporte va a ir a mejor. Ni en Budapest ni en Dubai he estado con mi entrenador y no he notado falta de ninguna cosa», advirtió.

La catalana estaba feliz porque en las anteriores competiciones no le habían salido «muy bien», pero sabía que la cita de Dubai «era el objetivo final del ciclo». «Quería hacerlo muy bien, me sentí muy bien, y entonces te ves bien, te animas, tocas y ganas», comentó.

«Además, he mejorado mis marcas y eso es importante porque tengo 26 años y que siga mejorando quiere decir que no he llegado todavía a mi límite», añadió la barcelonesa.

Finalmente, Mercedes Peris, bronce en los 50 espalda, reconoció que «después de ver» los éxitos de Mireia Belmonte y Erika Villaécija «era difícil no querer también una medalla». «Cuando ves que la compañeras están ahí arriba te entra el subidón. Fui a muerte y salió bien», subrayó.