El PSC tiene gran parte de culpa de su derrota. aunque buena culpa de ello ha sido de sus socios del PSOE que se han llenado la boca hablando que son de izquierdas para aplicar unas medidas que difícilmente se hubiera atrevido a promover el PP, se han llenado la boca de promesas que sólo han cumplido a cuentagotas.. muchos de sus votantes se han sentido engañados.

Con frecuencia los partidos confunden Madrid con España y sólo se acuerdan de la periferia cuando hay elecciones: ni conocen sus problemas ni las inquietudes de sus ciudadanos. El divorcio, con frecuencia, es total. Machado aseguró que la capital era “el rompeolas de las españas”, pero la clase política centralista parece que es insensible a los mensajes de las olas que le llegan

Montilla, tras asumir su derrota, también corresponsabilizó al PSOE de una parte de culpa. Desde Madrid no le han ayudado en su gestión y le han puesto todas las trabas posibles, incluso se han escandalizado por su actitud ante la sentencia del Estatut. Se sintió  engañado como se sintió en su día Artur Mas ante la promesa de Rodríguez Zapatero de que sería presidente de la Generalitat el candidato más votado. Después reeditaron el tripartito…

En la calle Ferraz se han olvidado de Catalunya. Ya gobernaban “los suyos” en las dos esquinas de la plaza de Sant Jaume (Generalitat y Ayuntamiento), ya tenían en el Congreso 25 diputados del PSC a los que se les obligaba a una férrea disciplina de partido. Ello propiciaba que en el Parlament votaran una cosa y la contraria en el Congreso. Nunca han atendido su vieja reivindicación de tener un grupo propio que dieran voz al millón largo de catalanes que les han votado, ni tampoco las promesas en inversiones que después no se realizan. El resultado –y esto en la calle Ferraz deberían tomar nota- ha sido la deserción de una parte importante de sus votantes. Los votos se dan y se quitan y es muy osado considerar que son patrimonio de alguien.

Si esto pasa con Catalunya, que junto con Andalucía ha sido el principal granero de votos socialistas, ¿qué pasará con las otras comunidades cuyo peso no es tan importante? ¿Conocen las inquietudes de Extremadura, Cantabria, Castilla La Mancha, Galicia o el País Valenciano? Parece que en Ferraz no han aprendido la lección de los resultados en estas elecciones. La lectura que parece que hacen del resultado no ha servido para que los dirigentes socialistas vieran que se les encienden todas las alarmas (y en mayo hay elecciones municipales y autonómicas). No es un problema puntual de una comunidad concreta, es que han de revisar profundamente su discurso, sus dirigentes, no encerrarse en Madrid y pisar más territorio. Falta aire fresco y asumir que Madrid es muy importante, pero España es algo más que Madrid. Y demostrar que la palabra federal es algo más que un calificativo tan bonito como hueco.

La credibilidad cuesta mucho ganarla, es relativamente fácil perderla y es muy difícil recuperarla