Un inexperto Dijsselbloem pone en jaque al Ibex, además de Milán y París

25/03/2013

M. V. R.. El Ibex que había estado en ganancias toda la jornada, ha perdido un 2,27% tras las manifestaciones del presidente del Eurogrupo, registrando la mayor caída desde el 26 de febrero.

El plan de rescate acordado para Chipre representa un nuevo modelo para resolver los problemas bancarios de la zona euro si otros países tienen que reestructurar sus sectores bancarios, indicó el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, en declaraciones a Reuters y Financial Times.

«Lo que hemos hecho la última noche es lo que yo llamo hacer retroceder los riesgos», dijo Dijsselbloem horas después de rubricar el acuerdo de rescate para Chipre, que supondrá la liquidación del segundo mayor banco del país y la imposición de fuertes quitas a los depósitos no garantizados.

«Si se aprecia riesgo en un banco, nuestro primer planteamiento debería ser: ‘De acuerdo, ¿qué va a hacer el banco al respecto? ¿Qué puede hacer para recapitalizarse a sí mismo? Si el banco no puede hacerlo, hablaremos de los accionistas y los bonistas, les pediremos que contribuyan a recapitalizar la entidad y, si fuera necesario, también a los depositantes no garantizados«, añadió.

Después de doce horas de negociaciones, los representantes de la ‘troika’ y el Gobierno de Chipre acordaron el cierre del segundo mayor banco del país, con la transferencia de los depósitos garantizados, aquellos inferiores a 100.000 euros, al Bank of Cyprus, la mayor institución del país, mientras los depositantes no garantizados deberán afrontar pérdidas de 4.200 millones.

Asimismo, los depositantes no garantizados, cuyos depósitos superen los 100.000 euros, verán sus cuentas congeladas en Bank of Cyprus mientras se analizan las necesidades de capital de la entidad, que en caso de ser necesario serían cubiertas con los depósitos por encima de 100.000 euros.

Este acuerdo, conocido como ‘autorrescate’, implica que accionistas y tenedores de bonos de las entidades se vean forzados a soportar los costes de la reestructuración en primer lugar, seguidos de los depositantes no garantizados, lo que supone un radical cambio en la política de la eurozona cuando se cumplen tres años de crisis en los que los contribuyentes de la región han sufragado los cuantiosos rescates acometidos.

A este respecto, el presidente del Eurogrupo señaló la necesidad de terminar con el proceso por el cual los gobiernos y contribuyentes soportaban los costes de las ayudas, apuntando que la reciente calma de los mercados permitía llevar a cabo el cambio, aunque admitió la posibilidad de que se registrara cierta inestabilidad de nuevo a raíz de esta decisión.

«Si queremos tener un sector financiero sólido y saneado, el único camino es decir: ‘Mira, ahí es donde asumes los riesgos y debes afrontarlos, y si no puedes, entonces entonces no deberías haberlos tomado», declaró.

  La crisis se aleja

«Las consecuencias pueden implicar que se trate del final de la historia y, ésa, creo que es una posición que, ahora que estamos fuera de lo peor de la crisis, deberíamos tomar», añadió.

El modelo de resolución de futuras crisis bancarias enarbolado por Dijsselbloem supondría, de adoptarse, finiquitar el plan auspiciado por la propia eurozona hace apenas nueve meses por el que se planteaba la recapitalización directa de los bancos en problemas a través del fondo de rescate permanente.

Al ser cuestionado por las implicaciones de este nuevo modelo para países como Malta o Luxemburgo, con unos sistemas bancarios altamente endeudados, o para países con dificultades en el sector, como Eslovenia, el ministro holandés indicó que deberían reducir el tamaño de sus entidades.

«Supone afrontarlo antes de verte en problemas. Fortalecer tus bancos, sanear sus balances y comprobar si hay bancos en problemas, la respuesta ya no será automaticamente que vendremos y te quietaremos los problemas. Los haremos retroceder. Esa es la primera respuesta que necesitamos. Hacerlos retroceder. Tú los afrontas», explicó.

Dijsselbloem arrastra a pérdidas a las bolsas 

Las palabras del presidente del Eurogrupo cayeron como un jarro de agua fría en las bolsas europeas, que tras una sesión inicial de ganancias tornaron a pérdidas. En el caso del Ibex 35 se ha dado la vuelta al cierre de la sesión y se ha dejado un 2,27%, lo que ha llevado al selectivo a situarse en los 8.140,6 puntos, la mayor caída desde el 26 de febrero. Ese día, el selectivo se hundió un 3,20% hasta los 7.943,2 puntos.

   El parqué madrileño ha cambiado de tendencia después de que el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, haya afirmado que la reestructuración de los bancos chipriotas debería ser vista como un modelo para la zona euro.

Sin embargo, las palabras de Dijsselbloem no han tenido un efecto tan negativo en las principales plazas europeas, como Londres o Francfort, que se mantenían en plano. Por su parte, Milán se dejaba un 2,50% y París un 1,03%.

Los bancos han arrastrado al Ibex hasta la zona de pérdidas. El más perjudicado ha sido Bankinter, que ha cedido un 4,02%, seguido de BBVA (-3,6%), Santander (-3,24%), Banco de Sabadell (-3,12%), Banco Popular (-3,87%) y Caixabank (-1,53%).

Los grandes valores tampoco han conseguido mantener el tipo. Ibedrola se ha convertido en el ‘peso pesado’ más castigado, con un retroceso del 4,65%, seguido de Repsol (-3,7%), Endesa (-3,66%), Telefónica (-1,71%) e Inditex (-0,15%).

Sin embargo, el ‘farolillo rojo’ de la sesión ha sido Sacyr, que ha perdido un 4,90%, seguido de Iberdrola, Gas Natural (-4,49%) y FCC (-4,45%).

Tan solo tres valores han conseguido repuntar al cierre: Acerinox (+2,07%), OHL (+0,93%) y Grifols (+0,53%).

En definitiva, el vuelco no pudo ser más espectacular, después de la confianza lograda entre los inversores por el acuerdo sobre el rescate a Chipre, y que el temor de su salida del euro se alejara. Pero los índices europeos perdieron el avance de la mañana arrastrados por sus respectivos sectores bancarios. Si alguna entidad tienen problemas de solvencia, ha dejado claro Dijsselbloem, ya no será el BCE el que acuda a su rescate, sino que tendrán que ser sus accionistas, tenedores de bonos y depositantes los que deban rescatarla.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se situaba en 362,5 puntos básicos, frente a los 356 de la apertura, con la rentabilidad del bono a 10 años en el 4,964%.

En el mercado de divisas, el euro se ha situado en 1,2872 dólares.

¿Te ha parecido interesante?

(Sin votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.