Por su parte, en el marco de la negociaciones, los sindicatos han renunciado a un porcentaje del 30% la partida de Fondos Sociales y a las aportaciones empresariales al Plan de Pensiones durante 15 meses por la parte social.

Las fuentes sindicales han explicado que este «sacrificio» por parte de la plantilla se ha ofrecido en contrapartida a una garantía de empleo y estabilidad de los empleados, que además mantendrán, e incluso incrementarán, su poder adquisitivo.

Desde los sindicatos han valorado el acuerdo alcanzado de «notable éxito» teniendo en cuenta la situación «sin precedentes» actual debido a la crisis económica y a la caída de ingresos en el sector de las comunicaciones. Este «sacrificio» por parte de la plantilla se ha ofrecido en contrapartida a una garantía de empleo y estabilidad de los empleados, que además mantendrán, e incluso incrementarán, su retribución.

En este sentido, fuentes cercanas a la negociación han señalado que se ha alcanzado un acuerdo en un tiempo «récord» de tres semanas tras el voto de una mayoría a favor de 10 de los 13 representantes de los trabajadores que componen la mesa del convenio.

Garantizar el empleo

Los sindicatos han señalado que este acuerdo permite «solventar» una circunstancia «extremadamente compleja» mediante medidas temporales, sin merma de empleo, salarios o condiciones laborales, estableciendo además una «significativa diferencia con otras situaciones vividas en el sector de telecomunicaciones y por desgracia muy común en estos tiempos en muchas de las empresas españolas».

Las fuentes sindicales han resaltado la tranquilidad que supone para los trabajadores que no se lleven a cabo despidos en estos dos próximos años. Si bien cabe recordar que durante este ejercicio la empresa no puede llevar a cabo despidos colectivos debido a la vigencia del Expediente de Regulación de Empleo para 2011-2013, que se cerró con la salida de 6.500 trabajadores.