La primera reunión entre la banca acreedora y los nuevos gestores de Pescanova -la auditora Deloitte, a instancias de la CNMV- ha servido para poner sobre la mesa un tema prioritario: el grupo pesquero no podrá salir adelante si no recibe un crédito puente entre 50 a 70 millones de euros. Es una cifra que ya se había reclamado cuando estaba presidido por Antonio Fernández de Sousa, pero el tiempo ha jugado en contra de la compañía: se desmoronan sus filiales en el exterior, con problemas como la falta de dinero para pagar el carburante de los barcos que deja amarrada la flota.

Pero a las críticas circunstancias de liquidez de la multinacional gallega se une su enrevesado perfil financiero, que Deloitte todavía no controla totalmente. Según se puso de manifiesto ayer en el encuentro con los bancos que formaron el steering committee, el número de entidades financieras atrapadas en este concurso de acreedores puede llegar al centenar.

Y esa situación, a la que se añade que todavía no se han formulado las cuentas auditadas, dificulta que los bancos presten más dinero. Frente a los 1.500 millones que figuran en los resultados del tercer trimestre de 2012, el endeudamiento alcanzaría ya los 3.200 millones, cifra que la sitúa cerca de la bancarrota. Los bancos tendrán ahora que negociar quitas cuando se conozca la lista de acreedores y la cantidades adeudadas, señalan medios financieros, que se han comprometido a dar una respuesta a Deloitte respecto a la crédito puente.

La debacle en América Latina se ha trasladado desde Chile a Argentina, en donde ha solicitado el concurso de acreedores la filial Argenova. La derivada es que de la flota esos dos países, ahora paralizada, depende más del 35% de las capturas del grupo español.

No obstante, los administradores concursales han expresado a la plantilla su intención de «salvar» la empresa sin tener que tomar medidas que afecten al empleo. Los nuevos gestores han mantenido este martes varias reuniones con representantes de los trabajadores de Frivipesca, Frinova y Pescanova Alimentación, ante quienes quisieron «presentarse» y trasladarles un mensaje de «tranquilidad», según ha explicado el presidente del comité de Pescanova, Francisco Puga, de Comisiones Obreras.