Seis trimestres en recesión y la lentitud en el seno de la Unión Europea han llevado a un cambio en el discurso de Mariano Rajoy. El presidente del Gobierno se mostró hoy dispuesto a moderar el crecimiento de los precios públicos a cambio del apoyo de sindicatos y patronal a sus reivindicaciones en el ámbito de la Unión Europea. La falta de crecimiento y la inconcreción del BCE a la hora de activar al crédito han obrado el milagro, largamente esperado por los sindicatos, que celebraron el cambio de rumbo de Rajoy, si bien prefirieron esperar a que las palabras del presidente se conviertan en hechos.
Rajoy compareció este jueves antes la prensa después de una reunión de casi tres horas con los líderes patronales y sindicales. El presidente celebró el consenso que, dijo, hay en España entre los empresarios, los sindicatos y las fuerzas de la oposición en torno a las políticas que requiere España por parte de la Unión Europea. Con todo, Rajoy rechazó un pacto nacional por el empleo como le exige el líder de la oposición, Alfredo Rubalcaba, y otras fuerzas políticas y organizaciones, entre ellas los sindicatos.
Así, el presidente ‘popular’ explicó que además de las reformas nacionales, hay otras reformas que debe protagonizar la Unión Europea (UE). En este sentido, Rajoy ha pedido a los sindicatos y empresarios “unidad de acción” frente a la UE, ante el peligro de que se retrasen acuerdos ya tomados, como la unión bancaria, reclamada por su Gobierno y que debería estar lista en 2014.
Asimismo, el presidente pidió apoyo para anticipar a 2013 los planes de estímulo europeos, concebidos para fomentar la creación de empleo y el fomento de la actividad económica. Preguntado al respecto, Rajoy dijo que en situaciones de crisis “hay que ir a la mayor”, lo que en este momento “pasa por el crecimiento económico”, añadió, después de reiterar su preocupación por los seis trimestres en recesión que acumula la Unión Europea, con un decrecimiento del 2,9 por ciento desde el tercer trimestre de 2008, frente al crecimiento del 3,3 por ciento en ese período de Estados Unidos.
Aun así, el presidente repitió que sus prioridades pasan por el control del déficit y la realización de reformas estructurales. Sin embargo, a continuación, Rajoy enumeró como cambios pendientes la reforma de la Unión Europea, la integración europea y la liquidez europea. “No puede haber crecimiento sin crédito”, añadió, tras presumir del consenso de la sociedad española en torno a estas cuestiones europeas.
Moderación de precios públicos
Tras rechazar un gran pacto de estado por el empleo, Rajoy enumeró algunos asuntos sobre los cuales está dispuesto a hablar con los sindicatos y los empresarios. Entre ellos destaca el incremento de la protección social, algunas iniciativas en torno al empleo y la definición del factor de sostenibilidad de las pensiones.
Según anunció, el Gobierno creará grupos de trabajo para potenciar el empleo juvenil. En este sentido, previamente los líderes de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y UGT, Cándido Méndez, abogaron por ligar esta estrategia con las políticas de empleo que se anuncian en la UE, ligadas a la formación; mientras que Rajoy enfatizó la importancia de recuperar financiación para las inversiones, especialmente a través del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Tal y como se había anunciado, el Gobierno y los agentes sociales discutirán también sobre la reforma de las administraciones públicas y la modernización del tejido productivo. En este sentido, Rajoy enumeró algunas de las próximas reformas, como son la ley de unidad de mercado, la ley de servicios profesionales y la inminente evaluación de la reforma laboral. “Su objetivo final es el crecimiento económico y el empleo”, insistió.
“Es evidente que si todo fuera más rápido, sobre todo en Europa, todo iría mejor”, manifestó. “Se necesitan reformas dentro de España y el resto de países miembros. Pero también en Europa. Y todos necesitamos liquidez”, subrayó.
Rajoy pasó de puntillas sobre el bloqueo en que se encuentra la negociación colectiva ante la proximidad de la fecha en que podrían decaer los convenios de entre 2,5 y 3,5 millones de trabajadores, por el fin de la ultraactividad de estos acuerdos, decretada por la reforma laboral.
Abrirá diversas mesas de negociación
En cambio, el presidente se mostró dispuesto a apoyar el pacto de rentas alcanzado por sindicatos y empresarios en 2012; en concreto, Rajoy anunció que impulsará la contención de precios públicos para dar soporte a este acuerdo de moderación salarial y de beneficios, dijo, tras alabar sus efectos beneficiosos para la competitividad de las empresas españolas.
El Gobierno abrirá además otra mesa de negociación sobre formación profesional para el empleo con empresarios y sindicatos, según anunció Rajoy. Una segunda mesa de negociación analizará la marcha de la Estrategia de Empleo Joven y Emprendimiento, añadió.
Con todo, Rajoy insistió en que “una parte muy importante de los problemas de España se solucionan en Europa”. “Todo el mundo está de acuerdo en que Europa debe hacer reformas y avanzar hacia la integración política, fiscal y económica”, recalcó.
Por su parte, los sindicatos dieron la bienvenida a la reunión que fue promovida por Rajoy y que se extendió por espacio de casi tres horas. Sin embargo, el líder de UGT, Cándido Méndez, afirmó que la cita llega con 16 meses de retraso, tras la anomalía de un año como el 2012 en el cual se truncó el diálogo social, afirmó.
Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.