La Convención para la Protección del Patrimonio Cultural y Natural, firmada en 1972, ha ido creando una lista de lugares que poseen una importancia excepcional, y cuya preservación debe ser responsabilidad de toda la Humanidad. Son 188 lugares definidos por la Unesco como “Patrimonio Natural Mundial”. La Unesco exige, para entrar en tan selecto club, que contenga fenómenos naturales superlativos o áreas de excepcional belleza natural e importancia; ser uno de los ejemplos representativos de importantes etapas de la historia de la tierra. También, ser uno de los ejemplos eminentes de procesos ecológicos y biológicos en el curso de la evolución de los ecosistemas; contener los hábitats naturales más representativos y más importantes para la conservación de la biodiversidad, incluyendo aquellos que contienen especies amenazadas de destacado valor universal desde el punto de vista de la ciencia y el conservacionismo.

Fiel a su cita con la Feria del Libro de Madrid, la Fundación AXA y la editorial Lunwerg han organizado una exposición de 77 fotografías: “Tesoros naturales del mundo. Un maravilloso viaje por el Patrimonio de la Unesco”. La muestra se refuerza con un catálogo de 200 ilustraciones, obra de Pedro Molina y Ana Belén Berrocal, con prólogo de Joaquín Araújo.

En la exposición, y también en el libro, pueden contemplarse el Gran Cañón del Colorado, el Teide, la gran barrera de coral australiana, los bosques de la Amazonía, los volcanes de Kamchatka, las islas Galápagos o los fiordos noruegos.

Defensa de la biodiversidad

En la presentación de esta muestra y de la obra que la acompaña, Josep Alfonso, director de la Fundación AXA, señalaba que “estas exposiciones son ya una cita anual ineludible para todos los amantes de la Naturaleza” pero que todo constituían “una llamada de atención sobre la importancia de proteger y preservar la biodiversidad del planeta. “En nuestras manos está la posibilidad de que las maravillas naturales que vemos en aquí puedan seguir existiendo. De nosotros depende”, insiste.

Efectivamente, las fotografías que se pueden admirar en la muestra del Paseo de Carruajes del Retiro madrileño o en el libro editado por Lunwerg son un aldabonazo sobre la conciencia humana para que defienda la biodiversidad de la Tierra. Porque algunos de esos maravillosos lugares están en peligro.

Entre ellos, el Parque Nacional de Garamba, en la República Democrática del Congo. Es el tercer parque nacional más antiguo de África (1938) y está dirigido por el español Luis Arranz. La caza furtiva ha exterminado al rinoceronte blanco y amenaza al elefante, en medio del caos generado por las guerras civiles del país y de los vecinos Uganda y Sudán. En 1996, la Unesco incluyó el Garamba en la lista de Patrimonio Mundial en Peligro.

O el Kilimanjaro, que  con sus 5.895 metros es la montaña más alta de África. Patrimonio Natural de la Unesco desde 1987. Sus glaciares han perdido más del 80% de su superficie, y queda la sexta parte de su masa original. De seguir así, la masa glacial del Kilimanjaro desaparecerá en poco más de una década.