Algo más de la cuarta parte, el 25,1% para ser exactos, de la propiedad de las acciones de empresas cotizadas en la Bolsa española estaba en manos de familias nacionales. Son cuatro puntos más que hace un año, “y el nivel más alto desde hace casi una década”, como se destaca en la actualización del informe sobre la Distribución de la Propiedad de las Acciones Españolas Cotizadas que anualmente elabora el Servicio de Estudios de Bolsas y Mercados Españoles (BME). Y se traduce en un valor superior a los 100.000 millones de euros.

Este nivel de participación de las familias españolas en la propiedad de las sociedades cotizadas en la Bolsa, el 25,1% del valor total de las acciones, es el más elevado desde el año 2004. Mantiene a las acciones cotizadas como uno de los destinos más importantes del ahorro financiero de las familias españolas, superando, incluso, a los fondos de inversión que se habían mantenido por encima durante casi 20 años.

Con los datos relativos a 2012, es previsible que la participación de los inversores individuales en la Bolsa española siga manteniéndose muy por encima de la media europea. En el último trabajo sobre la propiedad de las acciones en Europa publicado por la Federación Europea de Bolsas (Fese), elaborado con datos relativos a 2007, la participación de inversores individuales en la Bolsa española era del 20,1% del total, cuando la media europea es del 14%.

La inversión extranjera tiene el 39,2%

No obstante este auge de las familias españolas, los inversores no residentes se mantienen como los principales propietarios de las acciones españolas cotizadas, con un porcentaje del 39,2% del valor de mercado, apenas 9 décimas menos que su nivel record.

Cerca de 9.000 fondos de inversión y de pensiones tienen participaciones en empresas del Ibex 35, por un valor de 72.000 millones de euros. Destaca la participación de fondos norteamericanos, con un valor superior a los 20.700 millones de euros, que multiplica por cinco la de las instituciones de inversión colectiva españolas.

Las empresas no financieras son el tercer grupo de referencia en la Bolsa española, con un peso en el conjunto del 21,7%. La reducción de dos puntos en la participación de los bancos y cajas, hasta el 5,2%, y el repunte de las Administraciones Públicas hasta el 0,5%, reflejan el impacto de factores relacionados con la crisis y la reestructuración del sector financiero español, señala el informe.