El seguro teme que la Unión Europea prohíba la diferenciación de precios por la edad

11/08/2013

Miguel Ángel Valero. El Tribunal Europeo de Justicia puede dictar una sentencia similar a la que impidió la utilización del sexo para fijar el coste de las pólizas

El seguro teme que la presión de los grupos partidarios de la igualdad a ultranza termine consiguiendo que el Tribunal Europeo de Justicia prohíba la utilización de la edad como factor principal para la fijación del precio de una póliza, como ya hizo con el sexo en marzo de 2011. No existe en Europa una directiva sobre la no discriminación por motivos de edad, como la de Igualdad, que forzó al Tribunal Europeo de Justicia a sentenciar que el sexo como factor clave en la valoración de los riesgos y, por tanto, en la fijación del precio del seguro iba contra esa norma.

Tampoco se ha puesto en marcha iniciativa alguna para promover que Europa impida la tarificación del seguro en función de la edad. Pero existe en las instituciones comunitarias una creciente corriente favorable a que se coloque la edad al mismo nivel que el sexo, y que no existan elementos discriminatorios como la discapacidad a la hora de contratar un seguro, aunque eso vaya contra la práctica aseguradora más ortodoxa.

El temor se justifica en que el impacto de una decisión de este calibre va a ser mucho mayor que en el caso del sexo. Hasta el punto de que haría prácticamente inviable que existan coberturas de seguros para mayores de 55 años. Porque si la máxima diferencia en tarificar atendiendo o no al sexo del asegurado puede ser de cuatro veces entre el precio más bajo y el más elevado, en el caso de la edad puede llegar a las 174 veces.

Las aseguradoras manejan, desde el inicio de esa actividad y utilizando técnicas actuariales, la edad como uno de los factores para valorar los riesgos y para determinar las correspondientes tarifas, especialmente en aquellos productos en los que es un elemento clave, como sucede en los de Vida y en los que cubren la longevidad, entre otros.

Elevación de los precios

En Insurance Europe argumentan que recuerda que las compañías de seguros utilizan la información sobre edad sobre discapacidad del cliente “sólo cuando éstos son factores de riesgo importantes”. En la federación europea del seguro insiste en que “la edad es un factor de riesgo muy importante, y se utiliza constantemente por las compañías de seguros para asegurarse de que las primas que cobran corresponden al nivel esperado de reclamaciones”.

Y avisan: “Sin la utilización de estos factores, existiría una grave amenaza para la continuidad y para la disponibilidad de algunos productos de seguros, lo que tendría negativo implicaciones para la elección de los consumidores”. Además, “la pérdida de fijación de precios basado en el riesgo también puede conducir a un mayor precio medio de las primas, y a una reducción de la cobertura para todos los consumidores”.

La edad no es una cuestión secundaria. Está demostrado que en un seguro de Automóvil tiene mucha más influencia que el sexo, y que es un factor fundamental junto a la zona geográfica o el tipo de vehículo para la fijación del precio.

En seguros de Salud la edad también es un factor importante para la valoración de los riesgos y, por tanto, para la fijación de los precios, como lo son la existencia o no de enfermedades crónicas o hereditarias o la influencia genética, entre otras.

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