Cuando ya quedan sólo cuatros días para que se celebre la junta de accionistas de Pescanova, que está programada para el jueves en primera convocatoria, todo apunta que el grupo que lidera la cervecera Damm y el fondo luxemburgués Luxempart ha tomado la delantera al expresidente de la multinacional pesquera Manuel Fernández de Sousa en la carrera por el control del consejo de administración y, por tanto, de la presidencia.

Y es que por más que la compañía esté ahora, después de acogerse al concurso de acreedores, en manos del juez y de Deloitte, el gestor concursal, los accionistas institucionales quieren controlar esa parcela de poder en un momento tan trascendental en el futuro del grupo en el que se deberá concluir y plasmar el plan de viabilidad que se conocerá en octubre.

Damm y su socio luxemburgués, a los que se unió desde el inicio de este batalla, el accionista y consejero José Pérez-Nievas, suman cerca del 17% de las acciones, tras la incorporación de Calolina Masaveu. Medios empresariales señalan que se unirán también algunos fondos, que no confían en el plan de Sousa, por lo que crecen las posibilidades que la propuesta de consejo de este grupo se alce con el éxito.

Uno de los puntos del programa de Damm es la reducción de consejeros a siete y que el 57% sea independientes. La lista está formada, entre otros, por José Carceller (hermano de Demetrio Carceller, presidente de Damm), Francois Tesch, por Luxempart y Pérez-Nievas, por Iberfomento. En los tres casos se trata de personas que ya están en el consejo, al igual que algunos de los que forman parte del colectivo de independientes, como José Manuel Urgoiti, que se decanta como presidente. Urgoiti, de fuerte perfil financiero, ha formado parte de la cúpula de BBVA y ha presidido Banco Gallego.

Por el contrario, al otro lado, el expresidente y Paz-Andrade parten con, al menos, el 11% del capital. Su propuesta de consejo se centra más en personas de trayectoria empresarial y que conozcan, como ha manifestado Sousa, el complejo negocio pesquero que tiene matices diferentes en función del país en donde se desarrolla.

Lo que supone una media sorpresa es que AEMEC (la asociación de pequeños y medianos accionistas) junto con el fondo estadounidense Cartesian vayan a presentar otra candidatura, si bien esto no supone que logren el apoyo de la mayoría de los accionistas minoritarios. Tampoco se conoce a la perfección el mapa societario de la compañía, aunque el grupo representaría el 30% del capital. Antes de la junta se celebrará un consejo de administración, que al menos será relevante, ya que tendrá que elegir la persona que presidirá la junta.

Por otro lado, El expresidente de Pescanova Manuel Fernández de Sousa ha presentado un recurso ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional contra la fianza impuesta por el juez Ruz de 178,85 millones de euros, al considerarla «desproporcionada». «El auto no incluye los cálculos u operaciones realizadas para alcanzar esta cifra, que resulta a todas luces desproporcionada, teniendo en cuenta que la totalidad de los perjuicios aducidos por los querellantes no alcanza los 100 millones de euros«.

En concreto, la defensa de Fernández de Sousa considera que dicha fianza no se justifica ni por la causa, ni por lo prematuro del momento, ni por la cuantía, que está basada únicamente «en lo que dicen los querellantes sin escuchar a los querellados».