El comité de Sniace cree que la situación «puede ser reversible» pero piensa que la empresa no tiene «voluntad» para ello lo que, en su opinión, como lo demuestra que el martes comunicase a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la ejecución del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción para los 533 trabajadores tras no haber llegado a un acuerdo y este mismo miércoles se estén enviando las comunicaciones de despido, que ya han recibido algunos empleados aunque no ha detallado cuántos.

Por su parte, el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha afirmado este miércoles que su Gobierno cree tener «algunas» medidas de presión que utilizará para que Sniace retome las negociaciones con el comité, aunque ha reconocido que no tiene «ninguna» confianza en que la situación de la empresa se pueda reconducir.

«Algunas creemos tener», ha dicho Diego al ser preguntado por los periodistas si el Ejecutivo disponía de «medidas de presión» de cara al futuro, medidas que ha confirmado que va a utilizar «sin ninguna duda» y, además, «inmediatamente».

Así ha explicado, tras concluir la reunión que ha mantenido con el comité de empresa, que a continuación iba a llamar al presidente en funciones de Sniace, Miguel Gómez de Liaño, para pedirle que «venga a sentarse con el Gobierno a hablar del futuro inmediato» de la empresa, es decir, «el de estos 20 días que todavía hay de margen para que se retomen las negociaciones».

Llegan las primeras cartas de despido

Los despidos anunciados cierran un capítulo en los diez meses de conflicto laboral surgido a raíz de la entrada en vigor de la nueva fiscalidad energética y después de que, hace 20 años, la crisis de los años 90 estuviera a punto de provocar el cierre de la factoría inaugurada en torno a 1945, que llegó a dar trabajo a 3.500 personas.

La que fuera Sociedad Nacional de Industrias Aplicaciones Celulosa Española (Sniace) inició este miércoles la comunicación por burofax de los despidos de un número indeterminado de trabajadores, después de que las negociaciones emprendidas entre los trabajadores y la dirección de la empresa culminaran sin acuerdo.

A pesar del inicio de los despidos, el comité de Sniace cree que la situación “puede ser reversible”. Así lo ha manifestado este miércoles el secretario del comité, Antonio Pérez Portilla, antes de reunirse con el presidente regional, Ignacio Diego, la cual desconocen en que términos se desarrollará y si el presidente les comunicará alguna novedad, aunque no confían mucho en ello ya que el presidente le «insinuó» ayer, en la conversación que mantuvieron por teléfono, que la empresa «no quiere ni hablar del tema».

«No se lo que habrá ocurrido de ayer a hoy pero si me tengo que remitir a la conversación que mantuve anoche con Diego me da la ligera impresión que no, porque la empresa, por lo que me insinuaba, no quiere ni hablar del tema», ha indicado Pérez Portilla.

No obstante, ha señalado que «no quiere adelantar acontecimientos» antes de la reunión «no vaya a ser» que el presidente regional pueda tener «noticias de última hora» que no le hayan sido comunicadas al comité de empresa. Y es que, a pesar de que el ERE ya se esté ejecutando, Pérez Portilla ha considerado que «la esperanza» de que la situación pueda cambiar «nunca se pierde» pero ha indicado que tal y como «los acontecimientos» muestran que «cada vez es más complicado».

El secretario del comité ha explicado que los representantes sindicales han accedido a mantener este encuentro con Diego porque, aunque la empresa no vaya a participar en la misma, «el Gobierno de una manera o de otra ha participado en todo este conflicto» y les parecía «oportuno» explicarle «cuál había sido la postura del comité en las negociaciones» que se han desarrollado en relación al ERE que Sniace ya ha «aplicado».

Propuesta de USO

En este punto, el secretario del comité ha recordado la situación que se generó en la última reunión de negociación, celebrada el pasado lunes en el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales (Orecla), cuando el sindicato USO presentó una propuesta propia sin comunicárselo al resto.

«A pesar de que no estábamos de acuerdo con el método -la forma en que se presentó la propuesta–, estuvimos defendiéndola todo el día e incluso cuando nos fuimos a comer daba la impresión de que se iba a entrar por esa vía», ha dicho Pérez Portilla. La propuesta de USO no contemplaba despidos pero si la aplicación de diferentes mecanismos para que, en un horizonte de tres años, se alcanzase la plantilla óptima que exigía la empresa.

Además, ha reconocido que fue «una sorpresa» para UGT, CCOO y Sindicato Unitario, que estaban «convencidos» de que «detrás» de la propuesta presenta por USO estaba la empresa, que finalmente los representantes de Sniace «atacasen y rechazasen» la misma. «No sé si algún día los libros de historia escribirán qué pudo pasar para que la empresa rechazará esa propuesta que en principio parecía que no llevaba despidos», ha añadido.

Pero, al final, ha relatado Pérez Portilla, la empresa les dijo que «no era cuestión de cuadrar las cuentas ganando menos» los trabajadores sino que «se tenían que hacer despidos». Además, a esto se sumó el tema de las jubilaciones en el que Sniace «no pensaba poner un duro» por lo que el comité no podía firmar esas jubilaciones que «en la práctica iba a ser muy complicado de hacer».

Sniace comienza a ejecutar el ERE que afecta a toda la plantilla