Cuando la normativa aprobada por el Gobierno para el sector eléctrico todavía no ha entrado en vigor en su totalidad -la ley ratificada por el Consejo de Ministros la semana anterior aún tiene que pasar por el trámite parlamentario-, brókers y analistas consideran que el impacto de los cambios sobre las compañías integradas del sector (Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa), con tener aspectos negativos, podría suponer el fin de la incertidumbre regulatoria que pesaba sobre ellas.

Para la firma Mirabaud, en un informe sobre el sector eléctrico en España titulado Cambio de ciclo, indica que Iberdrola verá afectados sus resultados en el mercado español en 2013 y 2014, aunque paliará los efectos por  su buen posicionamiento internacional, con un 55% del resultado bruto de explotación (Ebitda) originado en el exterior -en concreto un 24% en el Reino Unido, en donde crecerá a una tasa anual del 8,3% hasta 2015-. Por su parte el incremento en Estados Unidos será del 4,4% hasta el mismo año, mientras que el de América Latina, que representa el 10% del Ebitda del grupo, permanecerá estable debido a la evolución de las divisas.

En este contexto, al igual que otros expertos, opina que la empresa que preside Ignacio Galán cumplirá sus objetivos de deuda, uno de los ejes básicos del plan estratégico 2012– 2014, en los que se i¡incluía la reducción de sus niveles de deuda por debajo de los 26.000 millones de euros, «algo que esperamos que logre sin problemas y se sitúe en 24.699 millones o 23.969 millones (excluido el déficit de tarifa), lo cual permitirá que Iberdrola mantenga su rating de crédito en BBB. Su ratio de deuda financiera neta sobre Ebitda en 2013 quedará mejor que la media del sector. Mirabaud ha aumentado el precio objetivo de Iberdrola a 4,60 euros por acción (desde 4,21), con una recomendación a sobreponderar (desde infraponderar). Iberdrola, que cerró el viernes a 4,3 euros por título, cotiza en máximos de doce meses.

De hecho, la deuda neta ajustada de grupo con sede en Bilbao se situó en 28.800 millones euros al final del primer semestre de 2013, con una reducción de 3.225 millones respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Esta cifra no incluye los 2.153 millones pendientes de cobro del déficit de tarifa. Teniendo en cuenta esta cantidad, la deuda asciende a 26.650 millones, frente a los 29.318 millones registrados en el primer semestre de 2012. La liquidez alcanza los 12.000 millones de euros, dando cobertura a las necesidades financieras de los próximos 36 meses.

Para Ignacio Galán, «Iberdrola ha seguido avanzando en su compromiso de reducción de deuda, con una disminución de más de 3.000 millones de euros respecto a junio de 2012, pese a haber tenido que seguir financiando cerca de 2.200 millones de euros del déficit de tarifa».

Pese a las dudas que genera la nueva normativa, con el déficit de tarifa superando de nuevo las previsiones, los expertos los que sí esperan que en 2014 se produzca un punto de inflexión en la caída del consumo que comenzó en 2008. En esta línea, los analistas de UBS estiman que Iberdrola es una compañía bien diversificada y que cuenta con activos de alta calidad, con un 75% de ellos en sectores regulados o con ingresos asegurados, en renovables o en mercados emergentes como el de Brasil. «Iberdrola ofrece un atractivo posicionamiento a largo plazo», concluyen. UBS ha elevado el precio objetivo de la empresa a 4,20 euros.

Y desde Fidentiis se opina que, pese al recorte de los beneficios, la situación financiera de Ibedrola permanece «a salvo». «Creemos que la reforma del sector puede ser un buen punto de partida», frente al vacio regulatorio. 

Por su parte, la compañía estima que esta evolución hace pronosticar que también podrán cumplir con sus compromisos de remuneración a los accionistas respecto al ejercicio de 2013.