El ampliación del yacimiento gasista Margarita-Huacaya en Bolivia, que opera Repsol junto a la argentina PAE y la británica BG, ha elevado su producción a casi 15 millones de metros cúbicos diarios de gas natural desde menos de 10 millones de metros cúbicos -es decir, un 50%- tras la finalización del citado proyecto. Está segunda fase del campo de gas más importante del país ha ido inaugurada por el presidente de Bolivia, Evo Morales, y el presidente de Repsol, Antonio Brufau.

Para lograr este incremento, la empresa española ha realizado una inversión de 640 millones de dólares que incluye la construcción de un nuevo módulo de la planta de procesamiento, la perforación de cuatro nuevos pozos y la construcción de nuevas líneas de transporte.

Pero los objetivos no han acabado ahí. Ahora se estudia elevar la producción a 18 millones de metros cúbicos y después a 21 millones en la tercera fase. Este proyecto requerirá cinco años y una inversión de unos 400 millones en ese periodo.

Antonio Brufau indicó que llegar a esos volúmenes depende de la exploración que se haga con los proyectos de sísmica que realizarán en el área que operan. “Vamos a dedicar una inversión de casi 400 millones en los próximos dos o tres años entre la sísmica y vamos a ver el potencial que tiene toda la zona de Caipipendi (bloques Huacaya y Margarita)”.

El aumento en la capacidad de pozos y en el procesamiento de gas se destinará a cubrir la demanda interna y las de Brasil y Argentina.

El presidente de Repsol señaló que la compañía va a seguir trabajando en Bolivia, «porque consideramos que hay las condiciones para hacerlo”. Morales destacó que en Bolivia operan las empresas petroleras más grandes del mundo. «Las empresas más grandes del mundo están en Bolivia: Gazpron de Rusia, Repsol de España, British Gas de Inglaterra y Samsung de Corea del Sur; las empresas más grandes del mundo son socias, ahora, del Estado y de nuestra empresa YPFB”, añadió