A la sombra de “Las Meninas”

04/10/2013

Miguel Ángel Valero. El Museo del Prado expone 29 retratos de Velázquez y sus discípulos en la corte de Felipe IV

Velazquez3“Las Meninas”, la obra genial de Velázquez, no está físicamente en la exposición “Velázquez y la familia de Felipe IV”, que estará en el Museo del Prado del 8 de octubre al 9 de febrero de 2014 gracias al patrocinio de la Fundación AXA. Pero su sombra se extiende por toda la muestra, hasta el punto de que la gran novedad es que se expone, por primera vez en España, la copia realizada por su yerno y sucesor artístico, Juan Bautista Martínez del Mazo.

La muestra se centra en la actividad retratista desarrollada por Velázquez en su segunda estancia en Roma, con cuatro retratos (el de Inocencio X se expone también por vez primera en España, en los 11 últimos años al servicio de Felipe IV, y en la continuación de esa labor por Martínez del Mazo y Juan  Carreño.

Son 29 obras, que dan una idea de lo que es capaz de hacer con los retratos Velázquez, y que también hacen buena esa consideración de Felipe IV como “el rey con mayor conocimiento en pintura que haya tenido la Historia”.

Es muy interesante la comparación entre la etapa romana o papal, con una gran expresividad en los retratos para reflejar la personalidad y las inquietudes de las personas que le sirven como modelos, y las obras realizadas para Felipe IV, que se había casado con Mariana de Austria a finales de 1649, donde vuelve el hieratismo y la distancia.

Velazquez2Llama la atención también la presencia del universo femenino e infantil en obras como “La infanta María Teresa”, “El príncipe Felipe Próspero” o “La infanta Margarita, en azul y oro”, en las que el color se hace más denso y suntuoso, al tiempo que se incorporan alusiones espaciales.

La influencia de “Las Meninas” en esos retratos es indudable. La demanda de imágenes provocada por la llegada de la nueva reina y por los nacimientos de infantes y príncipes obligó a Velázquez a multiplicar el número de retratos, con su taller a pleno rendimiento. Pese a ello, son obras de una calidad iconográfica y técnica realmente extraordinaria.

 

Sucesores barrocos

Tras los retratos de Velázquez, que muere en 1660, las obras cortesanas de Martínez del Mazo y de Carreño muestran que se parte de soluciones aportadas por el maestro pero que se evoluciona hacia un estilo más abigarrado, barroco, que incorpora los espacios palaciegos como escenarios de las obras.

¿Te ha parecido interesante?

(+1 puntos, 1 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.