La Comisión Europea ha iniciado un proceso de inspección a varias compañías entre las que figura Abengoa y a las que se considera sospechosas de haber cerrado acuerdos anticompetitivos dirigidos a manipular los precios de los biocarburantes en el Platt’s Market on Close (MOC) y a impedir el acceso a otras empresas al proceso de fijación de precios en esta plataforma.

   La compañía andaluza revela esta investigación, a la que está siendo sometida su filial Abengoa Bioenergy Trading Europe, en el folleto remitido al supervisor del mercado estadounidense, SEC, con los detalles de su ampliación de capital mediante la emisión de acciones de clase B en Nueva York por valor de 400 millones de euros.

La compañía explica que el proceso inspector comenzó el pasado 29 de abril y que la Comisión Europea sospecha que las conductas irregulares se remontan a 2002. Además, afectan a varios mercados de Platts, incluido el de los biocarburantes.

«Entendemos que la investigación está todavía en una fase preliminar y que la Comisión Europea no ha iniciado aún los procedimientos formales», indica Abengoa, antes de asegurar que tanto la matriz como las distintas filiales «han cumplido siempre con las normas de competencia».

La empresa dice estar «cooperando activamente con la Comisión Europea», pero no puede anticipar el resultado de una investigación que, de demostrar alguna conducta irregular, podría provocar la imposición de multas de hasta el 10% de sus ingresos o la interposición de reclamaciones de daños y perjuicios por parte de los afectados.

En su folleto informativo, Abengoa explica además que, tras ganar en 2011 un arbitraje valorado en unos 190 millones de dólares (140 millones de euros) ante la Cámara de Comercio Internacional con sede en Nueva York, se ha encontrado con que el particular y la empresa denunciados, Adriano Gianetti Dedini Ometto y Adriano Ometto Agrícola, han recurrido.

En todo caso, Abengoa considera que, en este litigio relacionado con un acuerdo de compra de acciones de su filial ASA, las probabilidades de que sus rivales ganen la batalla judicial son «bajas».

Más frentes abiertos

Otro de los frentes abiertos se encuentra en Puerto Rico, donde Abengoa y la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) del país se han cruzado reclamaciones millonarias por la construcción de una planta en la que la empresa española ejercía de ingeniera y la caribeña, de contratista.

Abengoa puso una demanda contra AEE en la que le reclamaba unos 40 millones de dólares (30 millones de euros) por distintos conceptos, y la empresa puertorriqueña respondió con otra denuncia en la que pedía a la empresa española 450 millones de dólares (330 millones de euros).

Frente a estas batallas jurídicas abiertas, la compañía ha logrado que el Centro Internacional de Arreglo de Disputas sobre Inversiones (Ciadi) de Washington le dé la razón frente al Estado de México por la no renovación de la licencia de una planta de residuos. El laudo arbitral, fallado el 18 de abril, condena a México a pagar 38 millones de dólares (28 millones de euros) más intereses.