Cuando suena el despertador a las cuatro de la madrugada, abres los ojos y dices, estos humanos están locos...Sí, locos por llegar a Mumbai y comprobar que los prototipos Híbridos Range Rover han superado las pruebas extremas a las que los hemos sometido. Tenemos que llegar a Bombai a las 12 del mediodía porque nos han organizado un recibimiento y cortado una calle en el centro de la ciudad, además, mis anfitriones son ingleses y para ellos la puntualidad es ley.

La salida de Saret es tremenda, quizás la más impresionante hasta la fecha. El tráfico caótico ha desaparecido pero en las cunetas y encima de las tablas de los puestos callejeros hay decenas de personas durmiendo, apenas acertamos a verlos hasta que los faros los iluminan. Es de noche, vamos en silencio por el sueño y por lo que vemos, las bocinas ( que es la forma de conducir aquí, tocando el claxon a fondo y lanzándose entre los huecos) nos alteran la marcha pero no el pensamiento. Me dicen que es cultural, pero dudo mucho que la gente quiera vivir así.

En el hotel nos han preparado unas cajas de desayuno que acabarán repartidas entre todos los críos que se nos acercan en el primer peaje en el que paramos. La sonrisa es inmensa y sus dientes blanquísimos. Nos quieren corresponder regalándonos los pequeños amuletos que fabrican con hojas. Imposible aceptarlos porque preferimos que los intenten vender y se saquen una rupias. Nuestra caravana de siete todo terrenos, equipados con la última tecnología y rebozados con el barro acumulado de los 13 países por los que ha pasado (Alemania, Rusia, Kyrguistan…) llama la atención y es un contraste entre tanto camión decorado como si fuera Bollywood. Por cierto que al darle unos zumos a un conductor que tenemos pegado en un peaje, al levantarse, vemos que en la cabina van cuatro personas y que van sentados sobre un tablero y por supuesto, los cinturones de seguridad son inéditos.

El paisaje es precioso, montañas en pico muy frondosas, con las vacas habituales y la gente viviendo en sus orillas. El calor es pegajoso y no baja de los 30 grados. Vamos haciendo paradas puntuales y a la manera rústica, hacemos nuestras necesidades agazapados entre árboles que parecen Mimosas y potos gigantes. Luego, el desinfectante y una rociada de Relec anti mosquitos, por si acaso. Vamos cambiando de conductor para paliar el tedio de una conducción lenta y tortuosa. Notamos que estamos llegando a una ciudad clave porque el tráfico se normaliza algo, hay menos camiones desvencijados y chimeneas expulsando humos. Aún así, de vez en cuando el Discovery líder, nos avisa; «autobús en dirección contraria». Seis horas más tarde suena por la radio con la que nos comunicamos todo el convoy: Welcome to Mumbai, the city of Bollywood. Es nuestro guía Áqui, que nos acompaña desde que entramos en India.

Mumbai-Bombai, es una ciudad enorme, extendida, con unos atascos espectaculares, conviven edificios altos con chabolas, chamizos y semáforos que casi se respetan. Hay señales de tráfico, militares en los lugares estratégicos, recogida de limpiezas, un puente modernísimo y precioso que nos introduce en el skyline de la ciudad. También hay rascacielos y una amplia zona en la que se respira el pasado colonial inglés, a la que le faltan manos de pintura y rehabilitación pero que es preciosa y por tener, tienen hasta una reproducción del Big Ben. La expedición es tan importante y esperada, que han cortado una calle en la zona moderna que da a la playa y nos espera la prensa local y un grupo de tamborrada fantástico. La adrenalina es tal, que salimos todos de los coches abrazándonos y bailando al son de los tambores. Prueba superada. Hemos llegado a Bombai. La experiencia ha sido única, fantástica y enriquecedora. El equipo ha sido perfecto, qué lujo estar rodeada de tanta profesionalidad y educación. Como dijo Hans, nuestro jefe de expedición, parafraseando a Martín Luter King; We have a dream y hoy lo hemos cumplido. Un nuevo coche Híbrido ha nacido, hemos colaborado a pasar su prueba técnica de fuego y hemos vivido una experiencia única e irrepetible.

Mañana pasearemos por la ciudad….