La publicación por parte del periódico Expansión de la existencia de conversaciones avanzadas para una posible fusión entre el más pequeño de los bancos medianos españoles y el portugués Espirito Santo han sido negadas rotundamente por el Banco Pastor a la Comisión Nacional del Mercado de Valores mediante la publicación de un hecho relevante.

Fuentes cercanas al banco señalan la extrañeza de esa noticia y no le dan credibilidad por el hecho de que no se ha comentado nada en el seno del consejo de administración y, sin embargo, si fue objeto de estudio y análisis, la operación cerrada el pasado mes de diciembre de venta del 50% Gespastor, la gestora de fondos del banco, y Pastor Vida, la aseguradora de la entidad, al grupo portugués por un importe de casi 90 millones de euros. El consejo del Pastor se reúne este viernes y no está prevista en absoluto, señalan estas fuentes, ninguna información sobre una operación de ese tipo.

El banco, se afirma, no está apremiado por alcanzar algún acuerdo con terceros por su situación interna. No tiene vencimientos importantes de deuda en 2011 y realiza una actividad muy local, centrada en Galicia, donde no ha tenido que hacer frente a grandes problemas de morosidad o impagos.

El Pastor aunque cotiza en bolsa, tiene un blindaje que la hace prácticamente inabordable para una posible operación hostil: la Fundación Pedro Barrié de la Maza controla el 42,18% del capital de la entidad y tres accionistas más tienen cada uno de ellos el 5% del banco: Nova Caixa Galicia (5,36%), Amancio Ortega, a través de Pontegadea Inversiones (5,06%) y la parte de la familia Del Pino que abandonó Ferrovial a través de Casagrande Cartagena (5%).

Hace unos meses el Pastor habría mantenido conversaciones exploratorias con el Guipuzcoano para buscar alguna fórmula de trabajo en común, sin necesidad de llegar a una fusión y en medio de esas reuniones irrumpió el Sabadell quien propuso una hipotética fusión a tres bandas. Los responsables del Banco Pastor rechazaron de forma abrupta esa posibilidad por las formas en que se planteó y finalmente el Sabadell absorbió al Guipuzcoano. Las relaciones entre el banco radicado en Cataluña y el gallego quedaron deterioradas.

Entre los inversores significativos del Pastor solamente la caja de ahorros surgida de la fusión de las dos cajas hasta ahora existentes en Galicia puede verse presionada para proceder a desinvertir su participación accionarial de forma que descargue su necesidad de recursos propios para cumplir con los requisitos de capital que empiezan a exigirse. Pero una desinversión en la actualidad le generaría fuertes minusvalías ya que adquirió las acciones por un valor de 200 millones de euros y la cotización actual es bastante inferior. La Nova Caixa Galicia tiene intereses en tres bancos radicados de Galicia: el 5,36% del Pastor, el Banco Gallego, donde casi llega al 50%, y el Banco Etcheverría con el 37% del capital. El problema en este último es que el resto del capital está en manos de la familia fundadora de la entidad por lo que la participación del 37% no le da el control sobre el mismo.