«Queremos ser respetuosos con nuestro accionista, que es el que debe fijar los tiempos para una venta parcial de su participación. Estaremos a lo que diga, y hasta ahora siempre se ha hablado de una reprivatización en Bolsa a partir de 2015, que es también lo que figura en nuestro plan estratégico. Queremos aumentar el valor del grupo”. ·Es lo que responde José Sevilla, director general de Presidencia de Bankia, cuando se le pregunta por un posible adelantamiento al año que viene de la primera fase de reducción de la presencia del Estado (actualmente del 68,39%) para aprovechar la situación de los mercados, hacer más visible la recuperación de las ayudas públicas y compensar hipotéticas pérdidas en las subastas de las otras entidades nacionalizadas, NCG y CatalunyaBanc.

Sevilla se muestra cauto: “Estamos muy contentos con la evolución de Bankia, pero nos encontramos en el primer cuarto del partido, queda mucho, y hay partidos que se pierden en el último segundo”. Incluso se vuelve ‘amarrategui’ sobre las previsiones para todo el ejercicio. “Es un año para ser prudentes”, precisa, al tiempo que señala que se mantiene la previsión inicial de 800 millones de beneficios. Si se superara esta cifra, se destinaría a provisiones. Lo más que está dispuesto el directivo de Bankia es a abrir la puerta a una actualización del plan estratégico en 2014, si el cumplimiento de los objetivos sigue siendo tan rápido. Lo que no varía es el objetivo de una rentabilidad sobre recursos propios (ROE) superior al 10% en 2015.

“El plan de reestructuración es muy exigente, y sólo llevamos 11 meses. No hay ninguna entidad financiera, ni europea ni del resto del mundo, que en 11 meses haya hecho una reestructuración de este calibre”, insiste Sevilla. Bankia ha cerrado el 29,7% de la red de sucursales existente en diciembre de 2012, con el 19,6% menos de plantilla. El ajuste de red terminará en el primer trimestre de 2014, adelantándose a lo fijado en el plan estratégico.

Pese a la reestructuración, Bankia está ganando cuota de mercado en fondos de inversión (0,6 puntos), créditos de consumo y financiación a pymes. Precisamente, las tres actividades fijadas como prioritarias en el plan estratégico.

El director financiero del grupo, Leopoldo Alvear, destaca la segunda mejora consecutiva intertrimestral del margen de interés, pese al efecto negativo de las vacaciones de verano. Y sobre todo la reducción de las entradas netas en mora (los saldos dudosos bajan en 800 millones), aunque la morosidad suba al 13,6% por la caída del crédito. Sevilla pronostica que el crédito va a mejorar ligeramente en este último trimestre, para consolidarse en 2014.

Cambio del sentimiento inversor

“No sé si está entrando dinero a espuertas, pero sí que desde el verano hay un cambio del sentimiento inversor hacia los países periféricos de Europa, hacia España, hacia el sector financiero, y hacia Bankia, porque nosotros también hemos contribuido a mejorar la visión de los extranjeros hacia España”, comenta Sevilla.

Entre hipotecas de viviendas vendidas y subrogadas, desde abril, Bankia ha financiado 2.000 viviendas de la Sareb. Y en lo queda de año, se venderán otras 2.000. «Todo el negocio de la Sareb está en una tendencia de acceleración y crecimiento», insiste Sevilla.

Bankia quiere tener cerrado antes de fin de año el proceso de supresión de la licencia bancaria de su matriz, el Banco Financiero y de Ahorros. “Ya estamos hablando con el Banco de España, Ministerio de Economía, Frob y Comisión Europea para ver cómo se queda BFA”, señala Sevilla.

El directivo de Bankia pronostica también que el coste final de los arbitrajes de preferentes y deuda subordinada “estará por debajo de los 1.800 millones de plusvalías que ha generado el canje de híbridos», recuerda que el banco nacionalizado ya ha provisionado 825 millones de euros, y que más del 50% de los inversores recuperarán completamente su inversión.