Casi tres de cada cuatro monedas falsas son de dos euros, las más afectadas por esta actividad delictiva. Le siguen las de un euro (30.800 monedas falsas detectadas) y las de 50 céntimos (24.900).

En todo caso, el Ejecutivo comunitario destacó que las monedas falsificadas no son un motivo importante de preocupación para los ciudadanos porque su número total es muy bajo. De hecho, el ratio es de una moneda falsificada por cada 86.000 auténticas.

Bruselas ha atribuido esta baja tasa a la eficacia de los esfuerzos combinados de la oficina antifraude de la UE, OLAF, la Comisión y los Estados miembros.