Como consecuencia de la transacción, Telefónica mantendrá una participación del 4,9% en Telefónica Czech Republic y permanecerá como socio industrial y comercial de la compañía durante un periodo de cuatro años, según ha anunciado este martes la operadora a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Entre los impactos contables derivados de la transacción, la operadora presidida por César Alierta ha destacado el efecto positivo por reducción del nivel de endeudamiento del grupo que se estima en, aproximadamente, 2.685 millones de euros, en virtud del valor actual del precio a pagar por PPF y de la cantidad a recibir en concepto de distribución a accionistas.

Asimismo, la transacción generará una minusvalía contable de, aproximadamente, 56 millones de euros en los resultados del tercer trimestre de 2013.