El Gobierno de la Generalitat Valenciana  ha anunciado el cierre de Radiotelevisió Valenciana (RTVV), tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana por la que declara nulo el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que afectaba a más de 1.000 trabajadores.

Tras conocerse dicha sentencia, el gobierno autonómico hacía público un comunicado en el que explicaba que, una vez, «descartado el camino que había decidido emprender el Consell, sólo queda la otra vía que es, lamentablemente, proceder a la supresión del servicio público de la radio y la televisión de ámbito autonómico».

A continuación explica que la readmisión de los más de 1.000 empleados que estaban incluidos en el ERE «hace inviable» la continuidad de la cadena de televisión autonómica, dado que los gastos de personal de los 1.700 trabajadores de la plantilla suponen 72 millones de euros, a lo que habría que sumar el gasto de funcionamiento y mantenimiento. En definitiva, un coste que «la Generalitat no puede asumir en estos momentos».

Con esta decisión, otros 480 trabajadores del canal de televisión y radio (Nou, Nou24, NouRàdio y Nou Sí Ràdio) serán también despedidos.

La plantilla de RTVV ascendía a 1.628 trabajadores antes de la presentación del ERE, a través del cual 1.198 empleados se encontraban afectados pr el expediente. Para poder garantizar las emisiones, al final, 186 técnicos eran sacados del ERE. La Generalitat valenciana había asumido una deuda de 1.200 millones de euros antes de la última reestructuración del ente autonómico.

Pese a esta situación, el Tribunal de Justicia Superior de Valencia (TSJV) poco a podido hacer para aliviar el problema, ya que según explica en su sentencia, el ERE recurrido por los trabajadores muestra «vulneración de derechos fundamentales y libertades públicas». Por ello, indicaba que los trabajadores despedidos debían reincoporarse a su puesto de trabajo.

Asimismo, el Alto Tribunal estima que se «alteraron los criterios» una vez confeccionados los listados del personal afectado. Es más, algunos de los criterios se conocieron después de que se hubiera producido un «considerable número de ceses»  de otros empelados públicos que podrían formar parte de esos criterios nuevos.

También se incorpora en la sentencia «el poco tiempo» dedicado al periodo de consultas, y lamenta que la dirección de el ente público no aceptara ni una sola de las propuestas de los sindicatos, incluida la reducción de salarios.

Tras la decisión de cierre por parte del Consell de la Generalitat valenciana, los sindicatos han pedido que se garantice la continuidad de la radio y televisión públicas. La alegría por haber ganado la sentencia del TSJV desapareció muy pronto.

Lamentablemente, la televisión autonómica de la Comunidad de Madrid (Telemadrid) podría vivir en breve una situación similar, ya que los trabajadores despedidos en el ERE han recurrido ante el Tribunal Supremo, y el presidente madrileño, Ignacio González, ya ha anticipado que de no ser aceptado el ERE, también procedería a cerrar la televisión.