Los pensionistas no ganarán poder adquisitivo a lo largo de 2013. No todos al menos. En contra de la tesis del Gobierno, el sindicato Comisiones Obreras sostiene que, si hay ganancias, estas se concentran exclusivamente al final del año, coincidiendo con la moderación de los precios. En el caso más ventajoso, la ganancia de poder adquisitivo se queda en siete décimas, muy lejos del 1,8 por ciento del que alardea el Gobierno. Pero si abrimos el foco, y tenemos en cuenta la congelación de estas rentas en 2012, el saldo ofrece como resultado que los pensionistas han visto mermado su poder de compra en una media del 2,79 por ciento entre 2012 y 2014, teniendo en cuenta la subida limitada al 0,25 por ciento para el año próximo, muy alejada de las previsiones de inflación.

CCOO defiende que buena parte de los pensionistas perderán poder de compra en 2013, en contra de la afirmación del Gobierno. La diferencia estriba en el modo de analizar cómo actúa la inflación sobre las pensiones.

La tesis del Gobierno indica que los pensionistas han ganado este año entre un 1,8 por ciento de poder adquisitivo, en el caso de las pensiones iguales o inferiores a mil euros (dos tercios del total); y un 0,8 por ciento, en el caso de las pensiones más altas. Unas cifras que se obtienen de restar a la subida del 2 por ciento, en el primer caso, y del 1 por ciento, en el resto, la tasa de inflación en noviembre, un 0,2 por ciento según el dato adelantado.

En cambio, CCOO defiende que una parte de los pensionistas incluso perdieron poder adquisitivo en 2013. En concreto se trata de los pensionistas con rentas más altas. Tras la subida de un 1 por ciento en sus pensiones, estas personas sufrieron subidas de precios superiores a esa tasa la mayor parte del año, exactamente durante ocho meses, los que van de enero a agosto. La recuperación posterior no fue tan alta como para compensar la anterior pérdida. Como resultado, según los cálculos sindicales, los pensionistas con rentas superiores a mil euros habrán perdido entre un 0,3 y un 0,4 por ciento del poder adquisitivo en 2013, en contra de la ganancia del 0,8 por ciento que les adjudica el Gobierno.

Según este cálculo, que tiene en cuenta la inflación mes a mes, CCOO admite que el 66 por ciento restante de pensionistas -aquellos con las rentas más bajas- sí obtuvieron ganancias aunque muy inferiores a lo que dice el Gobierno. En concreto, estos pensionistas sufrieron una erosión en su poder de compra durante los meses de enero, febrero, marzo y junio; mientras que por el contrario, vieron reforzados sus ingresos reales el resto del año. En conjunto, el sindicato calcula que, si la inflación acaba el año en una tasa similar a la de noviembre, los pensionistas con rentas iguales o superiores a mil euros habrán ganado un 0,7 por ciento de poder de compra en 2013, una cifra muy alejada del 1,8 por ciento que les atribuye el Ejecutivo.

El sindicato sostiene que este análisis “estrictamente económico” refleja de forma más veraz el efecto de la inflación sobre las pensiones. En suma, con este estudio se demuestra, aseguran, que las ganancias de poder de compra se concentran al final de 2013, pero que distan de ser tan elevadas como para compensar las pérdidas anteriores. Algo que sí se logra si se mantiene la actual fórmula de revalorización de las pensiones en función de la previsión de inflación más una paga compensatoria, que el Gobierno se saltó.

Peor con la congelación en 2012

Pero esa distancia se amplía al incluir la congelación de estas rentas que el PP decretó para 2012. Incluso sin tener en cuenta el análisis anterior, el balance empeora.

Incluyendo 2012, los pensionistas con pensiones iguales o inferiores a mil euros habrán perdido un 0,1 por ciento del poder adquisitivo a lo largo del bienio que acaba el próximo mes de diciembre; mientras la pérdida se amplía hasta el 1,1 por ciento en el caso de los pensionistas con rentas superiores a mil euros.

Un deterioro de las pensiones reales a las que habrá que sumar la que se consumará el próximo año. Si se cumplen las previsiones de inflación del 1,5 por ciento del propio Ejecutivo, en 2014 todas las pensiones perderán un 1,25 por ciento adicional de poder adquisitivo.

Si además se unen los efectos de la inflación mes a mes sobre las pensiones, y la subida limitada del año que viene, la pérdida media de poder adquisitivo de las pensiones alcanza el 2,79 por ciento entre 2012 y 2014.

Según CCOO, al alardear, el Ejecutivo intenta “justificar” tanto la subida programada para el año próximo -que se queda en un 0,25 por ciento-, como el mecanismo de revalorización que prevé la próxima reforma de las pensiones, ahora en tramitación.

“El Gobierno intenta crear una cortina de humo”, asegura el responsable de Seguridad Social del sindicato, Carlos Bravo. En su opinión, la supuesta recuperación parcial del poder adquisitivo de los pensionistas tiene como único fin “justificar” la subida que ha aprobado el Gobierno para 2014 por valor del 0,25 por ciento. Con el sistema anterior -hoy todavía en vigor, las pensiones deberían subir el año próximo el equivalente a la previsión de inflación. La previsión de inflación del Gobierno español en 2014 se sitúa en el 1,5 por ciento.